III ¿POR QUE?, parte11.

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Por eso ser «malo», o mejor dicho, ser egoísta,

es un territorio más seguro, si no tienes un

condicionamiento social que haga que eso tenga

consecuencias. Es lo que pasa hoy en Venezuela.

El contexto social no genera consecuencias, y «yo

puedo ser malo», y eso, no solo no es castigado,

sino que es castigado «ser bueno», porque paso

por bobo, o se puede revertir «en mi contra». En

cambio, muchas veces, ser malo o egoísta, es

reafirmado socialmente. Es sinónimo de ser vivo,

ser chévere, incluso en ocasiones, «ser malo» es

hasta premiado, tal es el caso de algunos discursos

políticos, como: «así se defiende la patria».

Cuando tengo eso, revertirlo es muy complicado.

Y ahí cabe, sí, la afirmación de que ser malo,

egoísta, es más fácil, menos complicado. Primero,

porque son estadios más primitivos del ser

humano, salir de allí es más complejo, y segundo,

el contexto actual venezolano, no ayuda a que eso

genere consecuencias.

Pero lo anterior es muy distinto a la afirmación

de que todos estamos en posibilidad de asesinar.

Eso ya es otra cosa.

En ausencia del Estado sancionador, en el

sentido del Estado que ejerce el monopolio de la

violencia legítima, todo se distorsiona. Un ejemplo

es el caso de los saqueos, el Caracazo, en 1989; si

se echa para atrás, cuando en una tienda de

electrodomésticos veíamos a algunos llevándose

bienes, y la gente buena presenciaba que los demás

actuaban así, sin que nada los detuviera, al cabo

de un rato, mucha de esa gente «buena» o

«decente», empezó a entender que ser «bueno»,

era perjudicial. «Porque si soy bueno, tengo que

pagar 3 millones de bolívares por un televisor». El

malo se lo llevó sin que se generara alguna

consecuencia, es más, causó hasta aprobación.

«Ser bueno me perjudica. Mejor entro, robo el

aparato, y salgo». Si además, al salir con el

televisor, lo felicitan, la conducta es reforzada.

Las causas de la violencia se han estudiado

muchísimo, y volvemos con el concepto de

pluricausalidad, porque la violencia es un

fenómeno multicausal. Ahí concurren cualquier

cantidad de fenómenos, desde la impunidad, que es

una de las mayores, hasta la pérdida de influencia

El grito ignorado.Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu