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Estaba acostando en la cama, mirando al techo sin nada que hacer, más que torturarme pensando en que Mangel fue París con su novia Beatriz, seguro divirtiéndose, haciendo cursilerías de novios, abrazándose, besándose... follando.

- Yo lo besé también en París, aunque no salió en el video, porque me daba vergüenza mostrarlo, fue un beso sin duda real- dije en voz alta para al menos escuchar el eco de mi voz y no sentirme tan solitario y ni siquiera el eco me responde.

Vi como entraba Raspy al cuarto y se subía sin pedir permiso la muy sin vergüenza

- Raspy, ¿crees que mangel nos extraña?

- Miau!- fue lo único que obtuve como respuesta junto con un ronroneo, y se acerca a mi, en señal de que le acaricie un poco.

- No pienses que estoy celoso o algo así, me vale verga con quien salga, en serio, es solo que... no lo sé, ¿por qué justamente la llevo a Paris un 14 de febrero?

Raspy siguió tranquila con las caricias que le ofrecía, y lamiéndose una de sus patitas blancas.

- Debería salir un poco para despejar mi mente, no puedo estar aquí torturándome todo el día, de lo que estarán o no estarán haciendo, necesito mi vida joder.

Es así como salí rápidamente de la cama, y me puse mis pantuflas de star wars que molaban un montón, porque eran increíblemente cómodas y suaves, me encantaban, pero tenía que buscar zapatos y salir de esta casa antes de que me ahogara en mis pensamientos; busque en el armario mis zapatos azules y naranja, y me lo puse, luego de eso busqué mis llaves y mi cartera y me encamine hacia la puerta, antes de cerrar vi esa casa tan solitaria, en la que todos los días me toca vivir y pasar el rato.

- Necesito algo...o a alguien- deje aprisionado mis pensamientos en voz alta en la casa tras haber cerrado la puerta y me fui.

El salir de casa puede ser algunos días bastante normales y hay otros en los que es inevitable que alguien me pida un autógrafo o una foto, o incluso llamaban a alguien desde su celular para que le mandara saludos, toda una locura, y aunque ha pasado tanto tiempo, aun no me acostumbro a la idea.

Esta vez tuve suerte y nadie me encontró, llegue a una tienda de ataris la cual era mi favorita e iba cada vez que necesitaba aire y un poco de tranquilidad, soy un poco loco la verdad, mira que salir de mi casa en la cual ya tengo un atari para ir a una tienda de ataris a hacer la mismas cosas que ya hago en casa...yo solo me entiendo.

- Ah!, hola Rubius, tenías tiempo sin visitarnos- me saludo el dueño de la tienda muy sonriente al verme, era un señor muy simpático

- SI, si he estado muy ocupado la verdad, ser gamer no es nada fácil- bromee sin ganas, empezaba a sentir un vacío en el pecho

- Ja!, me imagino, chico, solo tú sabes de esas cosas, deberías un día grabar uno de esos videos tuyos aquí, yo estaría encantado.

- Me lo pensaré muchas gracias- me lo ha dicho muchas veces, pero la verdad nunca me he decido en hacerlo, ya que esta tienda está cerca de casa y si alguien vive en España, podrá reconocer la tienda, y por lo tanto, saber mi dirección.

Me acerque a uno de los ataris y empecé a jugar Pac-man, uno de esos juegos rudimentarios que no te cansas nunca de jugar; mi mente no estaba centrada en el juego, ya que aún pensaba en mangel, lo estaba empezando a aborrecer, como se atrevía a ocupar la mayoría de mis pensamientos.

Cuando pase de nivel, escuche la puerta abrirse y no pude evitar voltear rápidamente para saber quién era, y me sorprendí que esa persona estuviera en un lugar así, entonces perdí apropósito, para saludarlo, me hacía feliz verlo después de aquella fiesta en la que nos hizo bailar a mucha gente con sus mezclas de sonido.

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⏰ Last updated: Mar 12, 2016 ⏰

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Thinking on Ü- One Shot lemmon #PremiosElRubius2016Where stories live. Discover now