Una vez que terminaba con la primera humillación tenía que ir directo a la casa Mukami, así que cuando las clases terminaron fui rápido con Reiji para decirle que haría un trabajo con Azusa. La mejor mentira que se me ha ocurrido, lo sé. No le podía decir la verdad aunque me preguntó por qué no tenía a Teddy y eso me puso nervioso. Por suerte, le dije que me lo había olvidado en un salón y que lo iba a buscar en seguida. Otra mentira para escapar de un momento incómodo aunque sonó bastante rara pero, se la creyó.

De camino a un salón vacío me encuentro con Azusa. Este me sonríe para luego reír. Lo que me faltaba, que otro Mukami se ría de mi. Pero lo que me dijo no fue lo que esperaba.

-Tranquilo...Kou-san no es tan malo...solo jugará contigo y en un...corto tiempo te dará a tu oso...no será realmente un mes...nfu...

Pasó de largo dejándome solo en el pasillo. Esperaba que no mienta pero, nunca debía confiar en un Mukami, siempre mienten. Es más, con esa apariencia de niños "buenos", engañan a cualquiera. No sabía que clase de maldades tenía preparadas Kou pero, estaba listo para hacerlas aunque algunas me duelan. Sería duro estar un mes sin Teddy pero bueno, esto me pasa por idiota.

Pov.Kou
Kanato-kun era bastante divertido. Se enojaba fácilmente y eso me daba mucha gracia, pues hacía lo posible para no cabrearse del todo o si no...Adiós Osito~

Me gustaba aprovecharme de él. Era bastante ingenuo, osea, hacía de todo por su oso de peluche. Patético.

Desde siempre supe que mis hermanos y yo éramos mejores que esos Sakamaki. Definitivamente, quería que sufra por el golpe que me dio en mi hermoso rostro ¡Se lo merece!

Luego de verlo con orejas de gato y diciendo "Nya" a cada rato como un idiota, le dije que lo vería en mi mansión cuando termine el instituto. Como siempre, me miró con odio y desprecio pero, como me gustaba molestarlo, le dije que dejara esa mirada para otras cosas. Si hubieran visto su cara de: "No me jodas". Se veía tan gracioso y además sonrió. Nfu. Se tomó lo de obedecer muy en serio, me pareció perfecto.

Cuando me encontraba en mi mansión, les conté a mis hermanos sobre lo que pasó con ese Sakamaki. Todos se rieron menos Azusa. Claro, a Azusa se lo había dicho antes aunque tampoco se río pero, era común, casi nunca se reía de cosas graciosas como esa. Lo peor fue que me miró serio. Admito que eso me dio algo de miedo. Era como ver a una versión de Ruki pequeña muy seria (( Versión de Ruki pequeña jajaja -muere de risa- )).

Se escuchó que tocaron a la puerta y luego a Ruki llamándome. Cuando llegué a la puerta, vi a Ruki tapándose el rostro con sus manos mientras se reía. Noté la razón de su risa parado en frente de la puerta.

-No era necesario que vinieras hasta aquí vestido de esa forma- Yo comencé a reír también al ver a Kanato con su traje de maid el cual le quedaba muy ajustado.

-¡¡Me lo hubieras dicho antes de que haga esto!!

-Shhh no estés tan nervioso. Aquí tienes que estar calmado y lo harás, porque me tienes que obedecer...¿Recuerdas?

Bajó su mirada y me dijo: "Sí, amo". ¡Eso estaba funcionando a la perfección! Nunca creí que me iba a decir eso, aún así lo hizo y me gustó.

A la hora de la merienda, le ordenamos al enano que nos haga varios dulces y té para todos. De vez en cuando fruncía el ceño pero, asentía al rato con una notable falsa sonrisa. Ruki y Yuma disfrutaban bastante a la nueva maid y yo también. Nos atendía cada vez que lo llamábamos y traía todo como lo deseábamos. Una vez que terminamos con la merienda, lo obligamos a ponerse en poses ridículas y hasta recuerdo a Yuma tirarle agua con azúcar. Quedó todo pegajoso el enano en ese momento. Aunque todos nos divertíamos, Azusa seguía igual de serio.

Pov.Kanato

-¿P-Puedo ir a asearme?- Pregunté con ¿Miedo? Ashh...Así es, con miedo, para quitarme lo pegajoso del agua con azúcar que el gigantón me tiró encima.
Por suerte, me dejaron ir pero, con un acompañante. Vi a Azusa levantarse en seguida y me acompañó al baño del lugar.

Él se quedó afuera esperándome y yo me limpiaba como podía. Estaba callendo muy bajo y no quería seguir. Apenas era el primer día y ya estaba muy frustrado. Suspiré y miré mi reflejo en el espejo. Quería romper el espejo para no me verme en él. Me veía completamente ridículo, parecía un sometido.

De la nada comencé a sollozar y las gotas de mis lágrimas cayeron en mis manos. En un solo día me hicieron de todo y no me imaginaba que más iba a pasar después y eso me ponía aún más nervioso. Tenía la opción de seguir perdiendo mi dignidad o la de renunciar y perder a Teddy. Teddy era muy importante y con solo pensar que ese idol dejaba su repugnante y no tan horrible olor a flores en él, me enfadaba y hacía que quiera seguir. ¿Qué estaba diciendo? Ya nada de lo que decía tenía sentido.

Terminé llorando más y al parecer eso llamó la atención de Azusa.

-¿Estás...bien...?- Dijo asomándose por la puerta.

No le contesté del enojo que tenía hacia toda su familia. Él se acercó a mi y me miró a los ojos con una mirada bastante tierna.

-Ya te lo dije...no pasa nada...no lo hará durante un mes de verdad...

-¡¿Y si en realidad lo hace durante un mes?! Además extraño a Teddy...lo quiero conmigo otra vez...

-Pues...seguro será para llevarte...a un concierto sino...te dejará porque...eres hermano de Raito...

¡Raito! ¿Cómo no pensé en él? Raito me podía ayudar con esa promesa tan estúpida. Me sentí tan aliviado. Por primera vez, quería a un Mukami. Le grité a Azusa "Gracias" varias veces seguidas y salí del baño.

Con el pecho en alto me dirigí a realizar mis deberes otra vez. Sonreía a flor de pie sin importarme lo que me hacían, lo cual confundía a Kou en grandes proporciones. Que bueno que Raito es su amigo. Cuando le dijera todo lo que él me hacía, probablemente me dejaría ir y me devolvería a Teddy otra vez. Iba a recibir su merecido.

Promesa De Un Mes [Diabolik Lovers Yaoi]©Where stories live. Discover now