- Hazte la muerta o los demás vampiros descubrirán que estas viva si respondes a mi pregunta te dejare vivir ¿Está claro?... ¿Conoces a un humano llamado Yuichiro Hyakuya – dijo Mikaela alejándose del rostro de la chica.

- Mátame antes de vender a uno de nuestros compañeros – dijo Aihara sin ningún temor.

- ¡Cállate Yuu no es de los tuyos! - dijo Mikaela comenzando a alterarse, para él era imperdonable que estuvieran usando a Yuu para sus fines.

- Pero... ¿Tu qué eres? – preguntó Aihara sorprendida por la actitud de aquel vampiro.

- Eh Mika ¿Qué haces?- dijo Lacus interrumpiendo el momento.

- Esta humana también está muerta –dijo Mikaela tratando de no parecer sospechoso.

- Serán idiotas – dijo Lacus mirando a sus alrededores.

- Miren son rastros de haber matado a un vampiro – dijo Rene mostrando los múltiples uniformes de los vampiros tirados por todo el suelo de piedra.

- Lo más seguro es que pertenezcan a el ejercito del progenitor que estaba aquí- dijo Sumire tratando de desviar la atención de los vampiros de Mikaela.

- Lucal Wesker controlaba esta zona – dijo Rene mirando hacia atrás para mirar a Lacus, Sumire y Mikaela.

- Entonces él está... Supongo que también los del subterráneo deben de estar muertos- dijo Sumire mirando a Lacus quien ya había comenzado a reclamar.

- Unos humanos no pudieron haber matado a un progenitor – dijo Lacus sin poder creer lo que estaba ocurriendo.

- Señores Lacus y Rene ¡Todos los vampiros del subterráneo han sido aniquilados!- dijo un soldado haciendo que lo que había dicho Sumire fuera más impactante.

Lacus y Rene se sorprendieron al saber que también habían asesinado a Mel Stefano uno de los progenitores de la zona, decididos los vampiros que se encontraban ahí se dirigirían al lugar del décimo tercero progenitor Crowley Eusford, sin embargo Aihara al escuchar esto recordó que era el lugar en donde se había dirigido los otros soldados a cargo de Guren Ichinose, sin dudar en proteger a sus compañeros tomo de rehén a Mikaela quien estaba todavía cerca de ella, amenazándolo con un cuchillo que traía.

- ¡No se muevan! ¡Si se mueven juro que lo mato!– dijo Aihara acercando el cuchillo al cuello de Mikaela.


- (Esto no va bien) – pensó Sumire mirando a la chica que amenazaba a Mikaela, tratando de manejar la situación de la mejor manera sin cometer algún error que arruinara el plan de Mikaela.

- Mika ella aún está viva – dijo Lacus observando sin ningún interés la situación.

- Atrápala le sacaremos información -dijo Rene mirando a Mikaela esperando que este hiciera la indicación.

- ¡He dicho que no se muevan! ¡¿Es que acaso les da igual que muera?! – dijo Aihara alarmada por la situación, su voz se escuchaba desesperada, tenía que proteger a sus compañeros a toda costa. Sumire miró a la chica de manera amenazante y apretando con su mano su alabarda pensaba en irla a atacarla, los ojos azules de Mikaela observaron a Sumire dándole a entender que no hiciera nada y fuera paciente, la chica entendió la indicación y para contestar a esta afirmó levemente con la cebeza.

- Has lo que quieras si muere, será culpa suya –dijo Lacus sin intenciones de ayudar a Mikaela.

- Espera ¿Qué es lo que quieres de mí? – pregunto Mikaela calmado.

Owari no Seraph "Melody of the end"Where stories live. Discover now