Capítulo 29.

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Valentina

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Valentina.

No sé cuánto tiempo llevábamos sentados abrazados en el sofá, ambos estábamos en un completo silencio siendo abrazados por el calor de la chimenea. Estaba tan cómoda en sus brazos que no quería separarme de él.

<<Dicen que el silencio es la mejor respuesta...>>

—Es irónico todo esto.—Habló de pronto y yo me separo llevando mis manos involuntariamente a mi vientre.—Hace un par de meses le había dicho a Eric que no quería más hijo, porque me era suficiente con Christopher y bueno April también es parte de mi vida es como una hija mas.—Sonríe y menea la cabeza como si recordara algo gracioso de ambos pequeños.—Pensar que vamos a volver a tener un bebé me preocupa.

Me acomodo en el sofá y tomo sus manos para que las pose sobre mi vientre, Cameron en ningún momento desvía sus ojos de los míos.

—Lo vamos hacer juntos, no tienes de que preocuparte porque estoy segura que vas a ser un padre increíble para este bebé como lo has sido hasta ahora con Christopher.—Comencé.—Tú hijo habla maravillas de ti y debe sentirse el niño más afortunado en tenerte como padre.

—Si no fuera por él tal vez yo hubiese seguido siendo la misma basura, no hubiera mejorado mi relación con mi padre porque aunque no lo creas ese niño a quien amo con mi vida, me unió más a mi papá.—Dijo con voz serena.—Te juro que no les voy a fallar.

<<Sé que no lo harás...>>

—Necesito que sepas algo.—Él asintió esperando a que continúe.—Cuando estaba dispuesta a decirte lo de mi embarazo sucedió algo.—Relamí mis labios porque de pronto los sentí secos.—Fui a la playa después de mi primera ecografía y no sé cómo es que Jonathan dio conmigo.—De tan solo nombrar a mi ex esposo, la expresión de Cameron fue algo que no pude descifrar.—El punto es que él sabe que estoy esperando un hijo tuyo y me amenazo.—Pongo un mechón rebelde detrás de mí oreja.—Me dijo que si te decía de la existencia de este bebé haría todo lo posible para que yo perdiera e incluso si era necesario volver a dejarme postrada en una cama.—De tan solo recordar sus palabras sentí el pánico, mis ojos se llenan de lágrimas pero las retengo con todas mis fuerzas.—Tenía miedo, porque los que estaban con él también me amenazaron y dijeron que si decía algo la policía mi madre e incluso a ti les harían daño...—Cameron se pone de pie de golpe frotando su rostro entre sus manos.

—¡No entiendo que es lo que quiere ese infeliz! Esta tan obsesionado contigo, la verdad es que siempre fue así Valentina.—Apretó su mandíbula.—Lo busque para partirle la cara pero el muy hijo de puta es como si hubiese desaparecido de las fas de la tierra.—Levanta los brazos por el aire soltado un bufido.—Jamás en mi vida había sentido tanto odio hacia una persona, pero no voy a dejar que te haga daño ni a ti ni a nadie porque no pienso quedarme con los brazos cruzados viendo cómo se ríe de nosotros.—Dejó caer la manos junto al cuerpo.—Soy capaz de matarlo con tal de proteger a los míos.

Un Papá Rebelde: El Despertar. (TheHistoryAwards2020)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora