Capítulo 28.

2.2K 215 23
                                    

Eran las cinco. Me había duchado y vestido. Cogí mis cosas y me despedí de Suga para ir a casa de Ho Seok. Bajé las escaleras y caminé hasta la entrada. Al abrirla, Jimin estaba apunto de tocar el timbre. Mierda.

—Estaba a punto de tocar.—Sonrió mientras entraba.

—Lo vi.—Dije mientras daba pequeños pasos hacia delante.

—¿Ya te vas?—Preguntó.

—Sí.

—Pues bueno.—Tiró de mi y besó mi mejilla.—Nos vemos luego, guapa.

Entró y cerró la puerta. ¿Pero qué...? ¿No se ha puesto celoso? Bueno, también es verdad que el dijo que no sentía nada por mí. Pero... Dios, hasta que no se ponga celoso me duele. ¿Por qué coño vine joder? ¿Puede que me haya enamorado de Suga? ¿O quizás de Jimin? O quizás... Mierda, ahora esto no lo puedo hablar con Ho Seok y me estoy poniendo histérica.

¿Cómo podía Jimin actuar tan normal? Tenía su mejor sonrisa y hablaba como si solo fueramos amigos lejanos o... Vete tu a saber.

Toqué repetidamente el timbre de la casa de Ho Seok. Él salió abriendo la puerta con muy mala gana y enseñando su teléfono.—¿A si que en una cafetería?

Me acerqué a la pantalla. El idiota de Jimin había dicho que me vio saliendo de casa de Suga.—Solo estuvimos hablando.

Me empujó para cerrar la puerta. Bajó mi camisa, viendo un chupetón en el cuello.—Hablando.

—Me lo habrá hecho Jimin.

—Sabes que a Jimin no le gusta dejarte marcas como si fueras una vaca.—Se bufó.—Además, Suga siempre te lo hace aquí.

—¡Vale! ¡Lo hice con él! ¿Y qué?

—¡Que sólo te quiere para eso!

—Pues como Jimin.—Me senté en el sofá.—Y yo como idiota les sigo el rollo a los dos.

—Porque quieres _____... ¿Por qué no mandas a Suga a la mierda y pruebas a ver que pasa con Jimin?

—No puedo hacer eso.—Le miré.—Sabes que odio el amor.

—Entonces te contradices tu sola.

—¡Lo sé! ¿vale? lo sé.—Suspiré.—Además, Jimin no quiere nada conmigo tampoco como para que me digas esto.

—Eso no lo sabes.

—Hoy me vio saliendo de la casa de Suga. Y no le importó.

—Porque no es nada tuyo como para decirte que hacer o no.

—¿De qué parte estás?

—¿Acaso quieres que te mienta?

—No.

—Entonces cállate y escucha.—Se sentó enfrente de mí.—¿Vas a preguntarle a Jimin lo que siente por ti?

—Él me dijo que le gustaba cuando estábamos en los apartamentos.—Contesté.—Pero luego en tu casa me dijo que seguía estando conmigo porque no sentía nada si yo estuviera con él y otros.

—Normal que te líes tu sola. Dile que es lo que siente por ti _____...

—Puedo aguantar aún así.—Susurré.—A mi él no me gusta.

—¿No será que no sabes si te gusta él o Suga?—Entrecerró los ojos.—¿O es que te gustan los dos?

—Ho Seok...

El timbre sonó. Él se levanta y me señala.—Salvada por la campana.

Abrió la puerta. Era Jimin. Le saludó con un apretón de manos. Después se acercó a mi tirando de mi brazo. Al estar de pie, me saludó con beso en los labios... ¿Pero qué?

—¿Qué tal?—Sonrió.

Miré a Ho Seok quien tampoco entendía nada.—Bien...

—Me alegro.—Se giró.—Voy a coger agua.

—Vale.—Dijo Ho Seok. Él se alejó. J-Hope caminó hacia mí y susurró.—Pues va a ser verdad que no le importó mucho.

—Te lo dije.—Hablé en el mismo tono que él.

—¿De qué habláis?—Pregunta Jimin al salir.

—De nada.

—¿Por qué no reaccionaste cuando _____ estaba en casa de Yoon Gi?—Dijo Ho Seok.

—¡J-Hope!—Le grité.

—¡Quiero saberlo!—Exclamó cabreado.

—Ya dije que no me molesta.—Jimin bebió de su vaso con agua.—No somos nada.

—Lo sé.—Sonreí.

Y si no somos nada ¿Por qué mierda me duele tanto?

—Bueno, pues todo aclarado.—Se rió J-Hope.—¿Nos vamos?

—Necesito un momento.—Dije.—Voy al baño a maquillarme.

—No tardes.—Contestó J-Hope.

No tranquilo. Sólo voy a echarme a llorar hasta que se me pase. Pero nada, tu tranquilízate Ho Seok. Que yo... Yo odio a este imbécil. Puto Jimin. Asqueroso. Que le gusto dice, falso. Si yo... Te quiero Jimin. ¿O no te das cuenta? Solo que Suga es un imbécil, y me lía la cabeza. En verdad parezco una puta.

Vale, ya está. No llores más. Entro en el baño y me pongo un poco de rímel. ¿Si sigues llorando para que mierda te pones maquillaje? Lo intento de nuevo. QUE DEJES DE LLORAR.

Cojo el estuche y lo tiro al suelo.-Llorica.—Susurré para mí.

—¿Llorica?—Pregunta Jimin.—¿Estás bien?

—Sí.—Giré mi cuerpo. Me paso el cepillo por el pelo.

—¿No me lo vas a contar?—Me arrebata el cepillo y me peina él.

—No me pasa nada.

—Venga ya.—Se bufó.—No soy idiota.

—Yo no he dicho que lo seas.

—¿Me quieres contar qué te pasa o...?

—¿Te quieres callar? Le interrumpí.—Voy a llorar como sigas hablando.

Me agarró de los hombros e hizo que girara para abrazarme.—Lo siento.

—Esto no ayuda.—Sollocé.

—Es que no puedo ayudarte si no me dices que te pasa.—Murmuró.

—Jimin.—Le miré.—No quiero estar con otra persona que no seas tú. No quiero estar con Suga. Sé que hoy me acosté con él, y también sé que estuvo mal. Pero me he dado cuenta que cuando tú me dices que no sientes nada, me duele. Así que ahora si que llegó la hora de elegir.

—¿Elegir?

—Si quieres seguir conmigo o irte sabiendo que me gustas.

Suspiró.—Te quiero ______.

Para que mierda hablaré. No sé si estoy lo demasiado preparada como para saber si le quiero o no.

—¿Lo intentamos?—Pregunté.

—Claro.—Besó mis labios.—¿Entonces se lo diremos a Suga?

—No queda otra. No voy a esconderme de lo nuestro.

—No sabes lo feliz que terminó el día.

¿Por qué no estoy preparara para el te quiero? Y lo peor... ¿Por qué no quiero que Suga sepa esto?

Malditos sentimientos.-Jimin, Suga y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora