First Lesson

479 41 93
                                    

POV Donghae

Tras salir del despacho de mi padre con aquel muchacho recogí la americana gris claro que había dejado sobre el escritorio del recibidor.
Le miré serio mientras me la ponía con calma.
Estaba hecho una auténtica mierda, se olía a leguas el sangrado de su pulmón y cómo su corazón bombeaba más rápido para intentar curarlo, pero aquello tardaría mínimo 3 horas, y eso en el caso de que le diera sangre para reemplazar la que su cuerpo estaba perdiendo.
Pero aún así, aún con ese aspecto deplorable, tenía que admitir que era jodidamente atractivo, y si su ropa no engañaba mucho, también podría decir que tenía un cuerpo de escándalo.
Me deshice de esos pensamientos y carraspeé.

Lo agarré de nuevo por el brazo y fui medio tirando medio empujándolo hasta que llegamos frente a los ascensores y tras darle al botón de uno de ellos, esperábamos a que llegara.

Suspiré y me acaricié el puente de la nariz.
Aquella noche no se suponía que tenía que acabar así.
Había quedado con Soo Ah, una chica preciosa y con un cuerpo de escándalo que solo buscaba lo mismo que yo, divertirse una noche y al día siguiente pretender no conocernos, en definitiva, el polvo perfecto.

Pero no, ahora estaba ahí, en las oficinas de Kim Entertainment, una de las muchas empresas subsidiarias del imperio Kim, con un muchacho rubio en condiciones deplorables del que tenía que encargarme.
Definitivamente este no era mi plan.

-Si tanto te fastidia tener que estar aquí quizás deberías irte, niñito de papá. -Dijo el rubio rompiendo el silencio.

Ladee una suave sonrisa y luego lo miré, viendo cómo se tensaba y trataba de ocultarlo adoptando una pose altiva, manteniéndome la mirada.
Era mono.

No dije nada, simplemente le solté el brazo por donde lo tenía agarrado y tras localizar la zona de la perforación pulmonar, clavé con fuerza uno de mis dedos en sus costillas, haciendo que soltara un alarido de dolor y se retorciera apartándose de mi.
Asqueroso Lee.

-MALDITO HIJO DE PUTA -Gritó al tiempo que venía hacia mi con la intención de empujarme con su cuerpo, pero sobra decir que lo esquivé.

Tras apartarme lo agarré del pelo y le estampé la cara contra las frías puertas de metal del ascensor mientras él se revolvía.

Me pegué a su espalda, dejando mis labios a milímetros de su oreja.

-Shh... Quieto fierecilla... Pronto te enseñaré modales.. -susurré con voz grave.

El se revolvió de nuevo intentando zafarse de mi agarre, pero no dijo nada más.

Las puertas del ascensor se abrieron y lo empujé dentro, volviendo a sujetarlo del brazo.

-Vete a la mierda, Kim. -susurró.

Reí quedamente mientras las puertas se cerraban tras haber pulsado el botón del piso 17 donde se encontraba mi despacho.

-¿Eres incorregible no? Bien. Me gustan los retos, aunque veremos cómo quedas cuando termine contigo. -comenté relajado.

-No me das miedo pijo de mierda, ni tú ni ninguno de tu familia.

-No necesito que me tengas miedo. Lo que yo voy a enseñarte esta noche es respeto, más exactamente voy a enseñarte lo que le pasa a los idiotas como tú que no respetan ni el tratado ni a mi familia.

-¿Tu familia? -soltó una carcajada- ¿Sabes? Cuando tu papi me dijo que me iba a dejar en manos de su hijo, solo pensé en Dongwha. Nunca he oído hablar de ti. Defiendes tanto a una familia que te mantiene oculto.. Hmm.. ¿Por qué será? ¿Acaso eres un bastardo? Eres un error de una de las muchas noches de putas de tu pap..AAAAAAAAAAAGH! -Gritó de dolor cayendo de rodillas al suelo.

Bloody River {EunHae}{HaeHyuk}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora