¿Viaje en el tiempo? [NaruHina]

Pequeño Castigo Antes De Volver

¿A donde iré esta vez?, me pregunte agotado.

—Naruto.—Oí mi nombre, pude ver una silueta conocida.

—¿Quién eres?—Cuestione, era extraño estar en la mismísima nada y escuchar a alguien decir tu nombre.

—Maldito mocoso, ¿Enserio no me reconoces?—Esa voz... No...

—¡¿Ero-sennin?!.—Clame completamente incrédulo.

—El mismo.—Me sonrió.

—¿Qué haces aquí?

—¿Quién crees que te está enviando al pasado?

—¡¿Eh?!, ¿Fuiste tú?, ¿Por qué?

—El cielo es aburrido... Además quería verte, y es mi turno de mostrarte algo.—Soltó, el lugar se iluminó de la nada.—¿Ves esas pantallas?

—Como no verlas.—Eran enormes.

—Elige una.—Pidió Ero-sennin, mire las cuatro pantallas.

—Hmm... Esta.—Apunte la primera

—Bien... Ponte cómodo, Naruto.-Sonrío Ero-sennin, con un control encendió la pantalla.

En esta aparecía yo de pequeño, como de 7 o 8 años, estaba en la academia.

—¡Sakura-chan, ¿Jugamos juntos?!—Clamo mi yo pequeño a la pequeña Sakura-chan.

—No, gracias.—Dijo esta con una expresión de desagrado.—Quiero estar con Sasuke-kun.—Soltó en un dulce tono, yendo donde el teme.

Mi pequeño yo suspiró y fue al columpio, como siempre... Solo.

—Naruto-kun...—Ahora se mostró a una pequeña y adorable Hinata, mirándome triste.—Lo siento...—En eso se puso pausa.

—Naruto... ¿Notas algo?

—No entiendo.—Solté, mirando al viejo.

—Desde pequeño estuviste enamorado de Sakura, ¿no?

—Si, pero ahora amo a Hinata.—Asegure.

—Naruto, ¿Por qué Hinata y tu están juntos?—Cuestionó, yo alce una ceja.

—¿Por qué...?

—Porque Hinata jamás dejó de amarte, y eso que jamás notaste su existencia.

—Si, lo se, aún me lamento por eso.—Suspire rodando los ojos, el mismo Boruto me había regañado cuando lo supo...

—Naruto... Te voy a hacer sufrir un poco.—Soltó, yo lo mire confundido.—Un pequeño castigo por tu idiotez.

Dicho eso, todo se volvió negro, otra vez. Abrí mis ojos y vi la aldea, ¿Estaba en mi tiempo?, al ver las caras de los Hokage, allí encontré la mía.

Suspire aliviado... Sin esperar nada, fui directo a mi casa para estar con mi esposa y mis hijos. Sería una buena historia que contar.

—¡Estoy en casa'ttebayo!—Clame.

—Bienvenido.—Me saludó... ¿Sakura-chan?

—¿Sakura-chan?, ¿Qué haces aquí?.—Cuestione confundido, ¿Hinata la invito?

—Pero que dices, esta es mi casa, ¿Acaso no te alegra verme?, dejar a tu bella esposa sola... Y por si fuera poco no me das un abrazo, eres un mal marido.—Me regaño.

Esperen... ¿Sakura-chan mi esposa?, ¿Qué diablos ocurre?

—Sakura-chan... ¿De que hablas'ttebayo?—Cuestione nervioso, esto no es normal.—No me divierte esta broma'dattebayo.