Mi inevitable destino. (Calum Hood&tú) |MDET2|

37. "Te darás cuenta sola"

—Claro. —dice la morena levantándose del suelo.

—Cuando llegue quiero todo ordenado. —me avisa ______ (Tn) cuando yo voy a cerrar la puerta.

—Seguro. —digo con sarcasmo haciendo que ambas se rían antes de alejarse por las escaleras.

Sí, ______ (Tn) le tiene miedo al ascensor.

Me siento en el suelo, nuevamente, para terminar el trabajo que había empezado. Rebusco en una caja y encuentro una foto de nosotras dos cuando pequeñas, una de las primeras que nos sacamos cuando teníamos catorce años. Sonrío al recordar ese día.

Había ido sola a su casa, por primera vez. Su madre no estaba, andaba trabajando y su hermana estaba en la casa de una amiga. Al principio las dos nos habíamos comportado muy tímidas, pero todo cambió cuando pasó el almuerzo. Ambas nos dimos cuenta de todas las cosas que teníamos en común y fue ahí cuando conocimos a "5 seconds of summer" en ese momento empezó todo. Nuestra amistad, nuestra locura, el comienzo de todo lo que vivimos ahora.

Si no hubiera ido ese día a su casa, jamás nos habríamos hecho tan amigas... Nunca los hubiéramos conocido.

Un golpe en la puerta hace que me sobresalte y vuelva al ahora. Cuando tenemos nuestro propio departamento, estudiamos la misma carrera, y seguimos teniendo los mismos sueños.

Otro golpe. ¡Dios que impaciente, ______ (Tn)?

—¿Qué se te...? —no alcanzo a terminar cuando veo una cabellera rubia y unos ojos azules mirándome—. Luke...

—No tengo llaves. —dice con una sonrisa tímida mientras se encoge de hombros.

Sonrío débilmente y contesto—: Claro, pasa.

Él pasa y lo veo incómodo. Sus manos en las carteras de su chaqueta me hacen notar la tensión.

No quiero que sea así, antes no éramos así.

—¿Dónde está ______ (Tn)? —pregunta volteándose a mí luego de haber revisado el lugar con la vista.

—Salió con Alaska y me dejo con el trabajo sola. —le respondo en cuanto vuelvo a mi posición inicial.

Él mira las cajas y suelta una risita que, antes, me hubiera parecido tierna. ¿Ahora? Pff nah.

—¿De qué te ríes? —le pregunto con cara de enfado.

—¿Tú? ¿Ordenando? No me la creo, lo siento. —responde y al final de su frase se encoge de hombros.

Sí, que gracioso eh.

—Para que veas que he cambiado... —él me mira alzando las cejas, como si no me creyera nada—. Ya, ya, vale, no ordeno, pero es mi casa también... además.... No sé por qué lo esto haciendo.

Él vuelve a reír para reponer—: ¿Cómo te convenció?

—Ni la menor idea.

—¿Puedo? —pregunta haciendo señas al lugar al lado del mío.

Un escalofrío recorre mi cuerpo. ¿Por qué no?

—Claro.

Pasamos un rato en silencio revisando las cosas que contenían las cajas que nuestros padres nos habían mandado. Luego se me ocurrió poner música.

—¿Qué es esto? —pregunta Luke con cara de horror.

Me acerco a él y observo la fotografía. Una vergüenza inmensa invade mi cara y no puedo creer que mis padres me hayan mandado esa foto. ¿Cómo avergonzarme a ese punto?