1 Portland

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Ana

-Anastasia mueve tu trasero o llegaremos tarde.

Sí, esa es mi mejor Amiga Katherine que vive conmigo en un departamento muy amplio y lujoso, con una vista hermosa al parque que por suerte es nuestro, un hogar propio. Ella siempre está acosándome, dice que soy muy lenta arreglandome, por eso me despierta dos horas antes de que comiencen las clases de la universidad.

La conozco desde que estábamos en el instituto y tenemos muchas cosas en común como la pasión por los libros pero yo he escogido estudiar administración para poder llevar las riendas de la gran empresa que mis papas me dejaron al morir, de la que tomare posesión cuando me gradúe, cosa que será muy pronto porque este es mi último año; mis padres me dejaron una herencia bastante grande entre otras cosas.

Sucedió cuando estaba empezando la carrera. Ellos venían de un viaje de negocios en Japón y el avión privado en el que venían se estrelló contra una montaña dejando sus cuerpos casi irreconocibles. Me dolió bastante ya que no tuve la oportunidad de decirles cuanto los amaba y lo orgullosa que estaba de ser su hija.
Siempre a pesar de todos sus constantes viajes y tanto trabajo sacaban tiempo para pasar en familia junto con mis tíos y abuelos.

Así que después del accidente me mude y Kate vino conmigo porque estaríamos en la misma Universidad, que a pesar de tener tanto dinero me esforcé mucho por ser aceptada allí.

-oye Ana -Kate entra a mi habitación ya vestida con sus habituales Jeans que le quedan de muerte y un suéter gris con un dibujo de ositos. Si bastante infantil pero a ella le gusta -al fin ¿te inscribirás en el curso de literatura?

-creo que sí. Me gusta bastante -lleva insistiéndome en que entremos a este curso desde navidad.

-que bien porque yo también lo haré -aparte que somos inseparables.

***

-mira, ese chico guapo no deja de mirarte -me susurra Kate. Volteo a donde me señala. Es verdad, es bastante atractivo además. Se nota que hace ejercicio... su cabello rubio largo, ojos azules, piel canela y alto -dime si no es todo un bombón. Creo que le pedir su teléfono para ti.

-oye no, ni se te ocurra. Qué vergüenza, además creo que te mira es a ti -levante mis cejas

-no, no es a mi quien ve ¡vamos! No pierdes nada con intentarlo. ¿Es nuevo? Jamás lo había visto por aquí

-quizás. Tampoco yo

-bien. Pues voy a por el -cuando menos lo esperaba ella ya caminaba hacia él y comenzaba a  hablarle muy animadamente.

De vez en cuando miraba hacia ellos y me topaba con su mirada. Supongo que es lindo.

-¡lo tengo! -Llega Kate saltando como niña pequeña -su teléfono. Se llama Elliot Grey está en arquitectura, es de Seattle pero tiene un depa aquí y además está súper bueno. Solo hay que mirarlo para caer derretida.

-sí, derrítete tú entonces con tu canelito

-pero no está interesado en mi si no en ti -me señala con su largo dedo

-claro que no lo haré y como...

-pues me pregunto por ti obviamente. - pone los ojos en blanco

-bien dejemos el tema. Ahora vamos a clases no quiero llegar tarde el primer día

***

-Buenos días alumnos. Mi nombre es James Trevelyan -un hombre muy joven para ser maestro. También es lindo - y seré su profesor de economía financiera avanzada. Espero llevarme bien con ustedes y solo tengo tres reglas: uno, llegar puntual o si no, no entran a mi clase. Dos, entregar sus trabajos a tiempo y tres, nada de celulares. -Alguien toca a la puerta interrumpiendo la charla del profesor y este la abre

-lamento llegar tarde profesor pero estaba en dirección - ambos se miran conteniendo una risa. Es el adonis con el Kate estaba hablando. Le entrega un papel y se dispone a ir a su silla... detrás de mí.

¡Genial! No había más asientos.

Podía sentir sus ojos puestos en mí todo el tiempo, aparte de su perfume tan varonil. Delicioso

-bien. Pero que no se repita. Soy muy diligente por lo tanto exijo puntualidad con todo lo que respecta a mis clases. Tendré un cronómetro a la mano -todos los demás se ríen pero él está serio -no es chiste.

Todas las clases pasaron normales. En el receso fuimos a dirección para inscribirnos en el curso de literatura.

-disculpa -al salir de dirección tropecé con alguien pero no le preste mucha atención y seguí mi camino

-bien ¿ahora qué?

-ahora me muero de hambre así que vamos a la cafetería y después a clase de estrategia de marketing. -Mi amiga hace un mohín -relájate es la última. ¿Kavanagh? Exactamente que... hablaste con... ya sabes

-Elliot -Me conoce tan bien -Bueno pues básicamente nos presentamos, intercambiamos números y me pregunto por ti -wow

-¿en serio?

-aja. Quedamos en salir el fin de semana solo si te llevaba conmigo. Pero la verdad no estoy interesada en él. Ya he puesto mi ojo en otra persona -la miró sin dar crédito a lo que está diciendo. ¿Qué otra persona? -¿Qué?

-¿quién es? -Ella se ríe y se va caminando hacia la cafetería -oye, dímelo -la detengo

-el profesor Trevelyan -abro mis ojos como platos

-¿Qué? Estás loca. Sabes que no podemos fraternizar con los docentes, eso sería una falta grave. -Su expresión refleja diversión -Va en contra de las normas Kate

-¿y? no lo haré aquí. Fuera de la universidad podemos salir

-es igual. Sigue siendo tu profesor

-Ana deja de ser melodramática. Nadie se dará cuenta -vuelvo a tropezar con alguien pero esta vez se me caen las cosas que llevaba en la mano

-lo siento Anastasia -levanto la vista para encontrarme con los lindos ojos azules

-no...no hay problema. -Me entrega mis cosas -gracias -me da una sonrisa arrogante. Pongo los ojos en blanco, podría ser más estúpido ese gesto...

Kate se queda mirándonos como una tonta en vez de ayudarme.
El tipo no me atrae pero no está nada mal.

AMOR Y TRAICIÓN (FSOG) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora