Mi Vecino. [ElRubius y tu]

Capítulo 5

Llevamos ya dos rondas, y en las dos he durado menos de un minuto. Este juego no está hecho para mí. Bueno, rectifico, ningún videojuego está hecho para mí.

- ¡Que sepas que eres un abusón! Déjame por lo menos darte un puñetazo o algo.

- Créeme que aunque quisiera, no puedo. ¡Eres demasiado mala!- se ríe de mí. Será capullo...

- ¡Oye! Normal que sea mala, yo no soy de las que juegan a videojuegos... Es mi primera vez.- le digo mientras intento darle un golpe a su personaje. Pero nada, es en vano. Vuelve a ganarme por tercera vez.

- Menuda paliza te estoy dando...- se vuelve a reír. Me encanta su risa... ¿Pero qué estoy diciendo?

- Está bien, una más. Y esta vez, prometo darte aunque solo sea una vez.- le aseguro.

- Inténtalo... A ver si hay suerte

Pulsa volver a jugar y comienza la cuarta ronda de la noche. Como no, empieza dándome patadas y puñetazos, y yo sigo sin saber esquivarlos. Pero, no sé cómo lo hago, consigo darle a una serie de botones en el mando que consiguen esquivar uno. Aprieto un botón al azar (no tengo ni idea de lo que estoy haciendo) y consigo darle una patada. Nada más hacerlo, tiro el mando en el sillón y me levanto victoriosa.

- ¡Lo he conseguido! ¡He conseguido darte!- le digo gritando y saltando. Y él se empieza a reír de mi.

- ¡Pero por qué no has seguido! ¡Te acabo de matar!- miro el televisor y veo que tiene razón. Mierda, debería haber seguido jugando. Que tonta soy. Además se está riendo de mí.

- Bueno da igual...- digo quitándole importancia.- Lo importante es que te he dado.- le señalo con el dedo.

- Bueno, reconozco que me ha sorprendido y estoy emocionado que me hayas dado después de hora y media jugando...- se ríe de mí y se pone de pie como yo.

- ¿¡CÓMO!? ¡Mierda! ¡Son casi las doce de la noche! ¡Tendría que estar dormida!- mierda ¿cómo es que se me ha pasado tan rápido el tiempo?

- Es que muyaya, el tiempo conmigo se pasa volando- me sonríe con cara de pervertido. Perece que me ha leído el pensamiento.

- Bueno, muchas gracias por todo de verdad. Pero me tengo que ir. Tengo que estar despierta en menos de siete horas. Madre mía...- mañana no podré ni levantarme.

- Está bien, hasta mañana- me acompaña hasta la puerta. Pero antes de que me vaya, me retiene un momento.

- Oye, me has dicho que todavía tienes que colocar tu apartamento, así que... Si mañana te viene bien, si quieres me das un toque y te puedo ayudar a montar los muebles y eso.

- ¿Un chico "gamer" se le da bien la carpintería? ¡Menuda sorpresa!- digo en broma.

- Te sorprendería las cosas que se me dan bien...- me dice con una sonrisa pícara. Me río y me pongo roja al instante.

- Me encantaría que me ayudaras con el apartamento, sería una gran ayuda la verdad- se lo agradezco sinceramente. Además, no me importaría pasar más tiempo con él...

- ¡Genial! Pues me avisas cuando vayas a hacerlo. Solo tienes que cruzar el rellano muyaya- me responde con su típico acento. Cada vez que pone esa voz me gusta cada vez más.

- Vale, perfecto.- me río por su comentario.- Nos vemos mañana.- abro la puerta de su casa y saco las llaves para abrir la mía. Cuando la abro oigo la voz de Rubius.

- Buenas noches Rubita, duerme bien, que mañana tienes que madrugar.- me chincha.

- Capullo... Como me vuelvas a llamarme eso... Te quedas sin casa.- le amenazo con el dedo. Y cierro la puerta, pero antes de cerrarla le oigo hablar.

- Lo que tú digas, Rubita...- de mi boca sale una carcajada cuando cierro la puerta.

Mientras me pongo el pijama y me lavo los dientes, me doy cuenta de que estoy bastante cansada. No me había dado cuenta hasta que me he despedido de Rubius. La verdad es que me lo paso muy bien con el.
Cuando me voy a acostar, decido que esta noche no habrá lectura nocturna, estoy demasiado cansada. Eso me parece muy raro, ya que siempre me aseguro de acostarme con tiempo para por lo menos leer un ratito. Me parece raro que haya elegido antes jugar a un videojuego con Rubius que leer. No sé que me pasa, pero cuando estoy cerca de él, me comporto de una manera diferente a cuando estoy sola o con alguien diferente. Eso me parece muy raro, y no llego averiguar el porqué de eso.

Esa noche, mientras duermo, sueño con videojuegos, youtubers, vecinos, camisetas verdes, gorras planas, y ojos verdes y marrones oscuro.

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PREGUNTAAAAAAAAA: ¿QUÉ CREÉIS QUE NUESTRA QUERIDA PROTAGONISTA ESTÁ EMPEZANDO A SENTIR POR RUBIUS?
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