¿Gemela de Evans? || James Potter

Nine

—Necesitamos hablar con la señorita Evans a solas —pidió amablemente el de barba mientras miraba tanto a Lily como a los demás, estos asistieron sin decir nada y caminaron hacia la salida, James miró sobre su hombro logrando ver a Lía sentada en la camilla mirando sus manos, aquello fue lo último que logró ver antes de salir por completo de la enfermería.

Tan pronto como las puertas se cerraron Lily sacó su varita y le apuntó a James asustando a los demás por su repentina acción.

—Me dirás qué le hiciste a mi hermana si quieres seguir jugando Quidditch —Sirius se colocó frente a su mejor amigo y Severus tomó a Lily alejándola del castaño y de esta manera evitar cualquier incidente

—Yo no hice nada —habló entre dientes ya harto de ser acusado de haber hecho que Lía terminara en la enfermería—. Solo platicábamos en el pasillo, cuando nos despedimos ella se tambaleó hasta quedar recargada en una de las paredes y poco después gritó mi nombre —pasó sus manos por su cabello con nerviosismo.

—¿Por qué ella diría tu nombre?

—¡No lo sé! Maldición, Evans. No lo sé —el de anteojos se encontraba con los nervios en punta desde que Lía había gritado su nombre de aquella manera tan desgarradora—. Cuando ella grito yo corrí hacia ella, sus ojos cambiaron, ya no eran de su color original estos eran grises y sin brillo alguno, murmuraba cosas y después se desmayó.

Aquello parecía no tener sentido alguno, pero para Lily y Severus lo tenía, los dos se miraban sin decir nada, pero sabían bien de lo que se trataba y hubieran preferido que aquello no ocurriera.

—Creí que ya no pasaría.

—No duraría para siempre, Lily. Queríamos evitarle dolor, pero ya no podemos seguir con ello —Severus soltó un suspiro y se recargó en una de las paredes.

—¿De qué demonios hablan? —Sirius interrumpió la plática de Severus y Lily al estar totalmente perdido de lo que decían, al igual que el resto de los merodeadores,

—Sabemos lo que le paso a Lía —Lily se abrazó a sí misma.

—¿Qué le pasó? Maldición, Lily. Eso no es normal —James comenzaba a molestarse por tantas vueltas que le daban al tema, sentía que les estaba ocultando algo importante.

—¡Ya sé que no es normal! —gritó exasperada—. Ella puede ver cosas. Cosas que aún no han ocurrido.

—Espera, ¿Estás hablando de ver el futuro? —Remus miró las expresiones de Lily y Severus en busca de algún gesto que le diera a entender que su suposición era errónea, pero no encontró aquellas expresiones—. Eso es imposible

—No es imposible. Que no se común no significa imposible —Severus miró con mala cara a los merodeadores, definitivamente no le agradaba que ellos estuviesen ahí ni que preguntaran tanto sobre la condición de su mejor amiga—. Según Dumbledore han existido cuatro magos además de Lía con ese don, Lía es la quinta bruja con el don de ver el futuro y que sigue con vida.

—Tenía 10 años cuando sus visiones empezaron —Lily siguió con la explicación—. Desde entonces habíamos borrado sus memorias de dichas visiones con ayuda de Dumbledore.

—¿Por qué borrarle sus memorias? Ella tenía derecha a saberlo.

—No lo entienden, cada visión era un sufrimiento constante para ella, no sabe controlarlo y solo logra ver tragedias que ocurrirán en el futuro —Lily tapó su boca evitando un sollozo tras recordar los días y las noches en las que su gemela lloraba e imploraba que aquellas visiones terminaran—. Acudimos a Dumbledore cuando Lía dejó de hablar, evitaba a todos y se sumió en sus visiones, él fue quien decidió que era mejor quitarle sus memorias hasta que fuera el mejor momento —Severus la abrazó cuando comenzó a llorar—. Es mi gemela, lo que ella siente yo puedo sentirlo, Lía siempre ha sido la más fuerte, la más optimista y la más valiente, odiaba ver como poco a poco estaba perdiendo a mi hermana.

—No necesitas seguir. No tienes que explicar nada, lo has hecho por el bienestar de Lía y es todo lo que necesitamos saber —James entendía lo que habían hecho, él hubiera actuado de la misma manera si su hermana estuviera en la misma situación, ni siquiera se lo pensaría para hacer que su hermana no sufriera.

Los adolescentes se quedaron fuera de la enfermería en silencio hasta que McGonagall les mandó a sus salas diciendo que Lía se encontraba dormida y ya no habría más visitas hasta el día siguiente, nadie habló del tema solo caminaron en silencio. James ni siquiera habló con sus amigos tras llegar a su habitación, simplemente se cambió y se acostó aun con cierta pelirroja en mente, realmente aquella chica le intrigaba y comenzaba a gustarle.

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Tras varios días desaparecida vuelvo a actualizar y con buenas nuevas, la primera noticia es que el tráiler de la historia fue actualizado y espero sea de su agrado, y la segunda noticia es que la historia está inscrita en los Wattys, estoy tan emocionada <3

↬Editado↫

Pelirroja W