Capítulo 20.

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Volvió con él café que me había preparado aparte del suyo. Se sentó conmigo en el sofá y se quedó mirándome mientras yo no podía.

—¿Sigues enfadada?—Preguntó.

—No, créeme que no.

—¿Y entonces que te pasa? Sigues roja...

—El café.—Contesté tomando un pequeño sorbo.

Entrecerró los ojos.—Que rara eres.

—Ya ves.—Aún seguía sin mirarle. Me moría de la vergüenza si pillaba que en nada ya me había puesto a tono. Pero es que su voz...

—________.—Llamó. Es tan sexi.

—¿Sí?—Dije aún embobada.

—¿Sigues ahí o te has mudado a otro planeta?

—¿Qué de un planeta?

—¿Ya vas a empezar?

—¿A empezar con qué, Jimin?—Contesté confusa.

Tiró de mi camisa haciéndome inclinar para besarme. Se separó unos centímetros.—¿Ya?

—¿Ya qué?

Volvió a hacer lo mismo.—Que si ya estás más tranquila.

—Oh.—Sonreí. Cogí otro sorbo de mi café.—Claro.

—De repente estás muy rara. ¿Qué te pasa?

—No quieras saberlo.—Susurré para mi misma.

—¿Qué?

—Que no me pasa nada.

—¿Quieres comer algo?

—No, gracias.—Dejé la taza ya vacía en la mesa.

—¿Quieres ver la televisión?

—Me da miedo encenderla.

—¿Todavía estás con lo del porno?—Se rió.—Ya te dije que quité el DVD.

—Igualmente me da miedo... Puede que sean mentiras tuyas para que lo vea.

—No soy tan idiota como tú.—Se acostó en el sofá.

—Jimin.—Me quejé.

—Jimin.—Repitió simulando mi voz.

—No empieces.

—No empieces.—Hizo una regañiza.

—¿Otra vez?

—¿Otra vez?

—¡Jimin!—Me senté encima de él para pegarle, pero hacía fuerzas con sus manos para que no lo hiciera.

—Vale, vale, ya paro.

Nos quedamos unos segundos en silencio. Tenía una presión bajo mi intimidad. Los dos miramos hacia abajo. Era su pene.

—Más te vale.

—¿Puedes quitarte?—Preguntó.—Es que creo que se ma a empezar a subir...

—No quiero.—Le interrumpí.

—Te estoy avisando ______.—Gruñó.

—Ya lo sé.—Me moví, tentándolo.

—Pues, por favor, antes de que se me suba del todo...—Cerró los ojos.—Déjalo, ya es demasiado tarde.

—Ya, lo estoy notando.—Me acerqué a él. Puse mis manos en su pecho.

—Vas a conseguir que...

Malditos sentimientos.-Jimin, Suga y tú.Where stories live. Discover now