Aries ha llegado histérico esta mañana, me ha abrazado por 15 minutos.
Me ha pedido disculpas, yo le he dicho que no hay nada que disculpar, no ha sido su culpa haberme dejado, y sé que le ha dolido tanto como a mi.
Aries se fue, dijo que volvería mañana, me sentí sola, muy sola, pero siempre lo he estado.
Iba a dormirme cuando escuché tu voz, oh Escorpio, no me has olvidado.
YOU ARE READING
Escorpio
Short StoryEras un misterio, con tu chaqueta de cuero y tu aura impenetrable, eras una contradicción. Tu curiosidad no tenía límites, siempre preguntabas demasiado. ¿Nunca se te ocurrió que te podía mentir? Nunca comprendí porqué te me acercabas, y cada vez qu...