Max Payne

El Sueño Americano

Para hacer que esto tenga sentido es necesario regresar 3 años atrás, por aquel entonces yo aún estaba en el cuerpo. En el Departamento de Policía de Nueva York como detective, me planeaban transferir al Distrito Centro norte, mejor conocida como la cocina del infierno.
Recuerdo bien que mi mi amigo en un rango mayor al mio Alex me dijo ese día:

(Alex)-Así que ¿cuando vas a trabajar para mi detective Payne?

(Yo)-Me harías trabajar infiltrado en algún agujero infernal.
Lo siento Alex, Michelle y el bebe van primero.
¡Mira! Mi último cigarrillo, Es malo para el bebé.

(Alex)-Así eres tú max, Un típico boy scout.

(Yo)-Jaja nos vemos Alex.

(Alex)-Aún participas en el poker de la noche de los jueves. ¿Verdad?

(Yo)-Eso jamás lo dejaría, seria Cómo quitarle un caramelo a un bebé.

La vida era buena.
La puesta de sol en un dulce día de verano, El olor del césped recién cortado, los ruidos de los niños jugando.
Una casa junto al río, en la orilla de jersey. Una hermosa mujer y una niña.
Sin duda el sueño americano hecho realidad.

Llegue a casa y grite:
(Yo)-¡cariño ya estoy en casa!

Pero los sueños tienen la costumbre de echarse a perder cuando no estas mirando.
El sol descendió con practicada Bravuconeria el crepúsculo se arrastró por el cielo, cargado de presentimiento.
No me gustó como empezó el espectáculo pero me habían dado el mejor espacio, primera fila en el centro.

Algo desagradable había sido tatuado en la pared, un mapa de las cosas que vendrían.
Una jeringuilla con un particular liquido verde claro, con una V una etiqueta mágica llena de diabólicos significados.

Sonó el teléfono y conteste rápidamente:
(Yo)-¡escuche Alguien ha entrado en mi casa, llame al 911.

Una mujer con vos vieja me dijo:
(?)-Es la residencia Payne, ¿verdad?

(Yo)-sí, alguien ha irrumpido en mi casa todavía están aquí tiene que....

Rápidamente me interrumpió diciendo...
(?)-Bien me temo que no puedo ayudarle

(Yo)-¿quien es?
¿Hola?

La mujer me colgó bruscamente
Unos gritos vinieron de la alcoba era
Michelle suplicando que no maten a mi hija y una voz de un hombre con un tono de frustración  que gritaba: Callate, Callate! y acto seguido disparos.

Entre un hombre me apunto con una beretta 9mm para su mala suerte, yo había traído la mía del trabajó ambos nos apuntamos le dije....

(Yo)-alto soy policía! Baja el arma ahora!

Poco caso le hizo a mi intención de ayudarlo tras que pude sentir como su gatillo se movía le disparé justo en la frente.
Entre a la alcoba de mi hija rápidamente. Ese día algo me nació en mi, algo de odio e ira y un deseó rotundo de venganza, mi hija de 3 años estaba totalmente bañada en sangre mis lagrimas corrieron por mi rostro al ver esa escena tan diabólica, me acerque al cadáver de mi hija casi antes de poder tocarla escuche un disparó que venía de mi alcoba.
Con mucha prisa, entre a mi alcoba y lo único que vi fue a mi esposa recostada en mi cama muerta y una ventana abierta que delataba el método de escape de los delincuentes, apunte hacia la oscuridad desde mi ventana esperando que aparezca el maldito pero claramente solo había lo que ahora se encuentra dentro de mi, solo oscuridad.
Esto sucedió hace tres años. Todo se hizo pedazos en un minuto de Nueva York. 

El cadáver de uno de los asesinos reveló que estaban hasta la madre con una nueva droga de diseño:

Valkyr, V eso tal vez explicaba la V en mi sala el día de lo sucedido.

Después del funeral. Alex y yo logramos encontrar unos puestos en la DEA.
Nos llevó tres largos años conseguir una oportunidad en el caso Valkyr.
Finalmente, hace dos meses, un confidente nos dio una señal de que Jack Lupino jefe mafioso de la familia Punchinelo, estaba traficando la droga.
Fui en secreto sin que el departamento se entere y me infiltre en la peor familia de la mafia de New York.

Mis ganas de venganza no se detendrán si estaba en un escritorio de la DEA.