Capítulo XIX: 'joder, podría seguir siendo mía pero no lo es.'

736 56 11
                                    

Y no sabéis a qué velocidad me iba en ese momento el corazón, no sabéis como me temblaban las piernas y como mis ojos no querían dejar de mirarlo. A veces pensaba que no era el destino el que se encargaba de separarnos, ni la vida...éramos nosotros. Porque éramos unos orgullosos de mierda que se empeñaban en hacerse daño como si fuéramos masoquistas.

Estaba harta, estaba harta de estar mal cinco de cada siete días de la semana, estaba harta de que me doliera el alma por no tenerle...porque aunque no lo creáis ese vacío sigue ahí y nada ni nadie podrán sustituir ese lugar.

-Te tengo...-dijo agarrando mi cintura fuertemente- No sabes lo bonita que te ves desde aquí...-dijo acariciando mi cara con su mano.

-Gracias...-dije moviéndome para que me soltara.

-Y luego estáis llorando por las esquinas uno por el otro...pero sí parece que os buscáis-dijo Laura riéndose.

-¿Laura?-dijo mirándola Eric sin creerlo.

-Sí bobo, soy yo...-dijo Laura mirándole con una sonrisa.

-¿Estabais juntas?-preguntó Eric sorprendido.

-¿Por qué no?-preguntó Laura acercándose a nosotros- Ha pasado el tiempo y hemos crecido y sé que te hice mucho daño y a veces siento que no me lo perdono, pero ya le he pedido perdón a ella...-dijo Laura mirando el suelo- ya que a ti te lo he pedido tantas veces y no te has dignado ni a mirarme a la cara...-dijo Laura mirándole los ojos.

-Nos hiciste mucho daño...-dijo Eric mirándome.

-Tú también le has hecho daño ella y sigue a tu lado...-dijo Laura haciendo haciendo que levantara la cabeza para mirar a Eric.

-A veces hay que olvidar el pasado, hay que pasar página para ser feliz...-dije llamando la atención de Eric y Laura- y nosotras lo hemos hecho pero tú sigues estancado, sigues creyendo que tratando como la mierda a las personas vas a pasar página, pero perdona que te diga así te destruyes tú mismo y nos destruyes a los demás...-dije para después marcharme y dejarlos solos.

***

Y una vez más se iba y me dejaba aquí solo, matándome la culpa por seguir siendo ese chico que parece que no quiere a nadie. Pero todo esto es una total mentira porque a veces la he llegado más incluso que a mí mismo.

Mi fallo fue no demostrarle que la necesitaba a mi lado para seguir, que necesitaba su olor para respirar, que necesitaba sus ojos para que guiaran mi camino, que necesitaba sus besos para perder la cordura. Demostrar, es un verbo tan utilizado pero tan poco practicado, y no sabéis como me gustaría ser como esas personas que luchan por lo que quieren, sin pensar en si les harán daño o acabará mal...porque cuando quieres a alguien estas dispuesto hasta que esa persona te rompa el corazón , porque si se trata de esa persona parece que va a dolor menos, parece que va a doler menos, va a doler menos verla y sentir que esta tan lejos, que ya no vendrá por detrás y te abrazará para sacarte de toda la mierda en la que vives.

-¿Vas a dejar de ser tan gilipollas?-preguntó Laura sentándose a mi lado.

-Déjame en paz Laura, no estoy para tus sarcasmos...-dije enfadado.

-Me importa una mierda como estés o no...-dijo Laura haciendo que la mirara- me importa más que no te estás dando cuenta de que la estás perdiendo, se esta yendo y tú estás aquí sentando sin luchar por ella...

-Estoy harto de luchar ya...-dije mirando al frente.

-Acaso... ¿lo has hecho?-preguntó irónica- Una persona que lucha por otra no sale con otra tía...-dijo recordándome porque estábamos así.

-Te recuerdo que una vez tú fuiste esa tía, la que nos separó digo...-dije echándole en cara.

-Sí, fui yo y no te lo niego...pero la culpa de que ahora no estéis juntos solo la tienes tú...-dijo haciéndome sentir culpable- porque puede que esa chica este muy buena, y que folle muy bien...-dijo hablando de Sofía- pero ella nunca te hará sentir lo que te hace sentir Ainhoa con solo tocarte, con solo dedicarte una sonrisa, porque hay que ser demasiado tonto para no darse cuenta de que eso sigue ahí y que cada día que pasa parece más grande...-dijo para abrirme los ojos- Eric reconoce que la sigues queriendo...

-No puedo, reconocerlo significa hacerlo real...yo ya la había olvidado-dije tocándome el pelo nervioso.

-Si la sigues queriendo es que no la olvidaste muy bien...-dijo tomando mi mano-Mírala, mírala y dime que no te mueres por ella, que no te mueres por ir ahí y decirle que la quieres y que no se vaya más de tu lado... mírala y dime que no te duelen las entrañas por verla bailar con otro...-dijo haciendo que mirara a la que una vez fue mi pequeña bailando con Dani.

-Me muero con cada detalle de ella, me muero solo con verla y decir 'joder, podría seguir siendo mía pero no lo es'-dije haciendo que Laura sonriera.

-Ve allí y ráptala...llevatela y hazle saber que esto todavía no ha acabado...-dijo Laura levantándose de la silla.

-Espera-dije levantándome y tomándole el brazo- Gracias por abrirme los ojos cuando más ciego estaba...-dije abrazándola- estas perdonada...-susurré en su oído.

***

Estaba bailando con Dani y vi como Laura y Eric llevaban hablando un buen rato. Se veían bien juntos, a veces cuando quieres a alguien tienes que aceptar que él sea feliz porque si él es feliz yo también lo soy aunque eso me rompa por dentro. Pero sabía que Laura ya no quería nada con él, ahora tenía a Álvaro.

Los perdí de vista un momento, ya no estaban sentados hablando. Y entonces yo seguí bailando con Dani.

Dani, puede que me estuviera equivocando y sobre todo puede que lo estuviera equivocando a él. Puede que lo estuviera ilusionando con algo que no podría ser. Estos días había estado más cerca de él, para ver si así de una vez por todas me olvidaba de Eric.

Pero a veces eso de que un clavo saca otro clavo es totalmente mentira.

Cuando me di cuenta se había acabado la canción que estábamos bailando y entonces me fijé en Dani que estaba ahí mirándome y sonriendo...se veía realmente pero no podía compararse con la belleza de el dueño de mi mirada favorita.

Y justo cuando estaba pensando en esto, lo vi acercarse a nosotros.

-¿Puedo hablar contigo?-dijo haciendo que Dani nos dejará solos.

-¿Qué te pasa?-dije mientras me tomaba de la cintura y no dejaba de mirar mis ojos.

-Que te quiero...

CONTINUARÁ...


La casualidad más bonita de mi vida (II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora