Resumen (Parte 5)

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Capítulo 41: Antoine Richis era un renombrado cónsul de la provincia que tenía la hija más guapa comarca. Se llamaba Laure. Tenía 15 años y estaba en edad de casarse. Su p
adre se sentía convencido de que el asesino aun seguía vivo, aunque anteriormente cuando se producían los asesinatos no mostraba preocupación de ningún tipo pero ahora si la tenia, ya que era tan bella que todo el mundo la deseaba, y decidió tomar medidas de seguridad.

Capítulo 42: Esa misma noche a Richis le despertó una pesadilla enorme, corrió hacia su dormitorio convenciéndose de que estaba muerta; pero no, estaba allí sana y salva. El padre entendió que el próximo objetivo del asesino sería su hija, por lo bella y perfecta que era. Se puso en el lugar del asesino adivinando así sus próximos pasos. Eso le traería cierta calma.

Capítulo 43: Esta obsesión llevó al padre de Laure a esconderla en un lejano monasterio en una isla, aunque su verdadera intención era casar a su hija con el hijo de un Barón, para que así se desposara y tuviera un hijo y así la joven no sería virgen. Permanecería diez días allí y la recogería para casarla con aquel chico.

Capítulo 44: Cuando Grenouille estaba realizando sus tareas rutinarias sintió la impaciencia de cumplir su obsesión de conseguir a la última fragancia. Al salir del taller, su patrón le comentó el viaje del cónsul al norte con su hija. Fue a buscarla hacia el norte, pero su olfato lo guiaba hacia el sur, así que, fió de su sentido del olfato y se alojo en una posada cerca de la costa, sabiendo que la muchacha y su padre se instalarían allí.
El padre inspeccionó el hostal, pero vio a Grenouille dormido y tan bueno, que le pareció indefenso.

Capítulo 45: Cuando todos estaban durmiendo, entró en la habitación de Laure y todo fue muy silencioso. La mató de un golpe seco en la nuca, y momentos después comenzó los procedimientos para la extracción de la fragancia. Envolvió a la joven en la manta engrasada y esperó. Era una parte muy importante, y para Grenouille, no era una espera, sino una reflexión. En esos momentos aprovechó para recordar los hechos que hizo en el pasado y se alegró de tenerlos infiltrados en su interior.

Capítulo 46: Un poco antes del alba Grenouille empieza a recoger y a retirar los paños untados en grasa de la muchacha. Richis se había despertado de buen humor, y había dormido de maravilla. Acudió a la habitación de su hija para despertarla, sin saber lo que pasó aquella noche anterior. Abrió la puerta y vio a su hija echada en la cama, desnuda, muerta, sin pelo en la cabeza y una blancura deslumbrante. En ese momento recordó la pesadilla de aquella noche. Era exactamente igual.

Capítulo 47: La noticia había llegado rápidamente a todos lados y se ordenó la captura del asesino. Un oficial de guardia, un centinela, logró recordar la cara del individuo en cuestión, y corroboró su reflexión recordando que era el mismo hombrecillo que trabajaba en un taller en un pequeño pueblo: era el taller de madame Arnulfi. Grenouille fue encarcelado. Tenían la certeza de que el asesino era él.

Capítulo 48: Grenouille se hizo llamar el asesino de las 25 vírgenes. El pueblo no podía creer que dentro de ese cuerpo existía tanta maldad. Grenouille no dijo nunca para que quería matar a las 25 chicas. Richis hacía comentarios en el pueblo diciendo que se alegraba de lo que le iba a pasar a Grenouille. Fue torturado hasta el momento de su muerte.

Capítulo 49: Todo estaba listo para su ejecución y el día tan esperado por el pueblo había llegado. Al bajar de la carroza ocurrió un: el pueblo, en vez de sentir odio por el asesino, comenzó a tomarle cariño, llegando esto a niveles tan elevados, que se desencadenó en una orgía. Grenouille sabía que su perfume elaborado con el trabajo de dos años daría resultados. Necesitaba ser alabado e idolatrado, aunque comenzó a sentir repugnancia por el hombre. Su sueño, se había convertido en pesadilla. De repente corrió hacia él con intenciones de matarlo aunque cuando llegó lo abrazó, lloró en sus hombros y se puso de rodillas suplicándole perdón. Al no esperarse las acciones que iba a llevar a cabo Richis, se desmayó.

Capítulo 50: Grenoulle al despertar de su desmayo, se encontraba en la cama de Laure, vigilado atentamente por el padre, quien quería que fuese su hijo. Ahora estaba en libertad de acción, pero le pedía por favor que fuera su hijo, para ocupar el lugar de su
hija Laure. Grenouille aceptó sabiendo que estaba influido por el perfume, que aún duraba su efecto de que todo el mundo lo quisiera. Al amanecer se marcha de aquella casa. Los ciudadanos de Grasse se levantaron con una gran resaca, como si se hubieran bebido bebidas alcohólicas. El caso de los asesinatos de las vírgenes fue cerrado hasta encontrar a otro culpable (Dominique Druot, su patrón), ya que las prendas se hallaron en su casa.

PARTE IV
Capítulo 51: Grenoulle no quería seguir viviendo, caminaba de noche rumbo hacia París, evitando así el contacto de día con otros seres humanos. Tenía El Perfume en su bolsillo y que con este podía hacer cualquier cosa en el mundo, aunque él sólo quería morir, y lo lograría en París. Caminó hacia un viejo cementerio, a un lugar donde se juntaban maleantes, ladrones y prostitutas alrededor de una hoguera. En un principio, éstos no se dieron cuenta de que estaba allí, hasta que Grenouille, cogió el pequeño frasco que contenía el perfume y se lo echó por encima. Su primera reacción fue de sorpresa, y luego pasó a un enorme deseo de poseerlo. Se acercaron todos a Grenouille, y se le echaron encima, le arrancaron la ropa y el pelo, le clavaron las garras y los dientes, cayeron sobre él como animales. En poco tiempo estaba partido en 30 pedazos, y cada persona cogió un pedazo y se marchó. Media hora después, Jean-Baptiste Grenouille, había desaparecido de la Tierra.

Resumen: El perfume.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora