Desaparecida

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Oscar

Después de la fiesta de celebración por el compromiso de Perla y Alex me fui al departamento a refugiarme una noche más entre las paredes de mi habitación y una botella de tequila, así han sido estas noches pero esta noche me siento aun peor no sé si deba por la celebración del compromiso de mi amigo pero conforme pasan las horas siento un gran vacío en mi pecho, este vacío cada vez duele más y no importa cuánto beba algo me dice que este dolor jamás se ira.

Al día siguiente voy al trabajo y trato de estar lo más ocupado que pueda para así evitar pensar en Ana, pero nada funciona ya que desde anoche siento este vacío en mi pecho, me siento como si me hubieran golpeado tan fuerte que me cuesta respirar y durante la noche me cuesta demasiado dormir ya que cada que cierro los ojos veo el rostro de Ana pero no se ve como la mujer sin corazón que vi hace unas noches, esta Ana se ve triste o tal vez eso es lo que yo quisiera, tal vez mi subconsciente me juega una muy mala jugada al hacerme creer de que Ana no será feliz si no está a mi lado pero la realidad es que ella tomo su decisión y fue vivir en el mundo de riquezas al cual pertenece dejando mi corazón partido en dos.

Han pasado cinco días desde que Ana y yo terminamos, estos días han sido un verdadero martirio para mí ya que no ha habido día en que no piense en ir a buscar Ana y me dé una verdadera explicación pero sé que eso solo serviría para herirme aún más de lo que ella ya dejo mi roto corazón. Decido arreglarme para irme a trabajar en vez de seguir atormentándome más con ideas que jamás fusionaran para alejar el recuerdo de Ana, lo único que si funciono fue haber tirado toda la ropa de cama, la cual estaba impregnada del perfume de Ana, obviamente tuve que comprar nueva pero era lo mejor que podía hacer así como también me decide de todas sus cosas.

Tengo media hora tratando de reparar una maquina pero no logro concentrarme debido al infernal recuerdo de Ana, nunca creí que el amor doliera tanto pero cada día siento como si algo dentro de mí se estuviera destrozando muy lentamente haciendo que el dolor sea aún más fuerte, estoy tan perdido en mis pensamientos que cuando Alex abre abruptamente la puerta de mi oficina hace que me sobresalte.

-¡¿Qué demonios te sucede?! – le grito realmente molesto.

- Es Ana, ella está desaparecida al parecer también la está buscando su padre – ante sus palabras siento que el alma se me va del cuerpo – voy a encontrarme con Perla solo te venia avisar sobre la situación.

Mi amigo abandona la oficina y tardo varios minutos en reaccionar sobre lo que está sucediendo así que tomo mi celular y le marco a Perla, el celular suena varias veces hasta que finalmente se escucha que Perla contesta la llamada.

- Perla, ¿Cómo que Ana está desaparecida?- le pregunto realmente angustiado.

-Si Oscar, tenía días sin verla y hoy su padre ha venido a mi departamento pre....

De pronto la voz de Perla es interrumpida por varios gritos y el sonido de un choque, la llamada se corta y cuando intento volver a comunicarme con Perla su teléfono dice que esta fuera de servicio lo cual solo hace que me preocupe aún más de lo que ya estaba, decido llamarle a Alex y avisarle de lo que acaba de pasar.

Mi amigo contesta inmediatamente – Oscar ya voy en ca...

Interrumpo a mi amigo - Alex creo que Perla ha tenido un accidente – espero alguna respuesta por parte de mi amigo pero no escucha nada de su parte – ¿Alex estas ahí? – cuestiono realmente preocupado por su falta de respuesta.

- Si, ¿Por qué dices eso?

- Estaba hablando con ella cuando se escuchó un choque y después de eso su teléfono comenzó a sonar que esta fuera de servicio, Alex lo siento amigo pero en este momento hablo a la Cruz roja para ver si saben algo...

Mi pequeño y gran secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora