tinta de invierno,hojas de otoño.

Contrario

Siento odio irrefutable al enamorarme,
pues soy un escéptico sin credo alguno,
me alejo de mi sol de paz como Neptuno,
y es que la magia, es real en animes.

Grito en medio de la calma,
callo cuando abunda la algarabía
mojo la cama con lágrimas
seco el dolor con paginas.

Solo me asusto de la realidad,
pesada e intransigente
dura como el hormigón armado,
blando,yo,como una almohada caliente.

Frágil como una copa de cristal
que se rompe al oírte rechazar,
una caricia tenue, cuando tu,
buscas encontrarte en la soledad.

Oscuro como el fondo del océano,
hubo un tiempo en el cual,se teorizo,
que en mi interior,hubo vida y ahora,
solo un trozo que no marchito.

Mareandome por darle vueltas al globo,
rasgados mis huesos por el suelo,
de tanta caída por soñar con,
tocar el cielo,desde este infierno.

Nublado por el humo,
quemado por el hielo,
cegado por el transfondo,
asqueado de este mundo.

Como las pastillas doy solución,
pero no conozco otra que no,
sea, margen y error,
o el persistente intento.

Evoluciono cual pokémon
con las piedras que tropiezo,
algunas imposibles,como
la depresión que me golpea.

Deja marca y se esconde
en el subconsciente,
o me hace caer en sus
agujeros nítidos para otros sentimientos.

Espartano en coliseo con,
espada de de acero,
pero con el pecho descubierto,
con la única opción de
atacar primero.

Si mi vida fuera un hilo,
compondría la tela que atrapa
la presa para la araña y el
final rápido del insecto.

Que reza por una nueva oportunidad
pero en el mundo de los mortales,
no hay dios que te salve,
pero su fe te mantiene cuerdo.

Siendo inexistente como
las promesas de los para siempre,
la realidad es efímera,
y en mi mundo predomina
la teoría existencialista.

Pues soy un hipócrita,que no,
sabe quererse sin amar antes,
llamo la atención para econderme,
entre sombras de alambres.

Espigas punzantes como un alfiler,
y una luna por la que no luche,
su blancura solo alcanzo con leche
que corta el café y con su espuma
cubre mi vista de nubes enanas.

El exilio para putas pasadas,
para mi que,soy perro del destino,
mi correa con mordidas,por intentar,
escapar de sus cadenas pesadas.