Rastros

Maldita Pendeja

-Cálmate si no quieres seguir lo entiendo- le dije acariciando su rostro

-Terminare, después de la muerte de ambos, quisimos buscar venganza, pero Josue solo se dedicaba a tomar y drogarse y fue así que nos alejamos y yo volví acá- dijo mas calmada

- Oh ahora lo entiendo - dije
- Si, el me busco hace poco y como te dije hace unos días me iba a dar unos datos, pero pronto desapareció y no supe mas hasta que lo vi en coma.
-Quien es la "Señora"?- pregunte.
-Creo que me tocaba preguntar a mi-dijo sarcásticamente.

-Te propongo algo, contesta mi pregunta y prometo que podrás ponerme el reto que sea- dije sonriente
-esta bien, la señora era la jefa del cartel que me secuestro, fue quien mato a Camila y Mariano y es la madre de Josue.
-Mierda! Eso puede ayudar a mi investigación- dije a ella.
-bueno ahora si lo que yo quiera no?- dijo picaramente.
-Si lo que quieras- respondi
- Besame...

POV ANDREA

Cuando le dije que me besara no espere realmente que lo hiciera, pensé que me pegaría una cachetada, que me insultara o se riera.

Pero nada de eso se dio por el contrario poco a poco se fue acercando y junto mis labios con los suyos, en ese instante me quede petrificada, no sabia como responder me sentía idiota quedándome quieta sin decir nada, pronto note el sabor de sus labios sobre los míos, y su lengua pidiendo permiso para entrar en mi boca, comencé a responder a ese beso. Un beso que denotaba deseo, un beso que no quería que terminara nunca, mis manos fueron asu cuello y la pegue mas a mi para profundizar el beso y no se como ni en que momento ella estaba sentada a ahorcada sobre mi, gimiendo de a pocos en el beso, lastimosamente por falta de aire nos tuvimos que separar.

-Yo yo... Wow- es todo lo que pude articular.
-Besas bien púlpito- es todo lo que me respondió antes de voltearse a su lado de la cama y dormir.

Púlpito? Que coño era eso como apodo, el beso me había dejado idiota pero pronto conseguí dormir.

***

Eran las nueve de la mañana y me encontraba en la oficina del director de Medicina Legal, esperando que me asignen mis funciones.

Desde que llegue todos habían sido muy amables pero aun no me decían exactamente donde y que funciones iba realizar.

-Señorita, usted estará trabajando junto con el Dr. Brown en la unidad forense de ayuda a crímenes de homicidio y abuso sexual- dijo el director.
-Esta bien, voy para allá.
-Debo recordarle que en esta unidad no se permiten errores. Sus horarios serán flexibles para que pueda continuar con sus estudios pero si le va mala en el trabajo o en la facultad, perderá ambos, entendido?
- Si señor- respondi
-Vaya a la oficina del Dr. Brown en este momento ya ahí un caso que requiera de su atención.

Salí de la oficina algo fastidiada por la forma que ese imbécil me había hablado, camine por los pasillos y me diriji a la oficina de Brown, en recepción estaba una chica que me dijo se llamaba Hailee y era la asistente, era guapa por que negarlo y había coqueteado conmigo desde el inicio de nuestra platica.

Cuando salio Brown de la oficina me indico que fuéramos al área de necropsias, en el camino me explico que había llegado el cuerpo de una fémina que a vista simple había sido agredida sexualmente y asesinada, teníamos que hallar lo mas posible para identificar a sus agresores.

-Andrea acá vas aprender que cada cuerpo te puede contar su historia, que hasta los rasgos pequeños tienen un significado - me dijo el dr. Brown, el era un hombre como de unos 50 años la experiencia y el trabajo arduo se le notaban en su cabello canosa y sus arrugas bien formadas.
-Si, doctor.

Cuando entramos a la sala de necropsias vimos el cuerpo, era una chica de 1.60 de altura delgada y se le veía realmente pálida, tenia rasguños en loa brazos y las piernas, una señal de ahorcamiento en el cuello, y la boca tenia un corte de lo que llamaban sonrisa de payaso, quien podría ser tan zadico?, tomamos muestras de loa fluidos vaginales de la mujer, tomamos muestras de sus uñas, examinamos cada golpe y cada moretón de la mujer, fue en ese momento que entendí que este trabajo no solo era medicina, este trabajo era el de descubrir una historia, era de investigar.

Estaba practicando mis cortes en el cuerpo de la mujer cuando entraron dos hombres junto con Martina y hablaron con Brown, Martina me miro seria pero en ningún momento me dirigió la palabra solo se limito a seguir con los apuntes que hacia en su libreta. Era obvio que me odiaba parece que me pase ayer con lo de pedirle un beso.

-Andrea! Te estoy hablando hace 15 minutos- dijo brown.
-Disculpe dr. Me perdí en mis pensamientos.
-Ingresa todos los datos que hemos mandado analizar al sistema y elabora el informe y se lo pasas a los detectives.
-Si señor.
-Andrea si algún policía del estado pide el informe, solo le darás datos vagos no todo lo que ponemos en el informe real, entendido?
- Si - respondí

Me encamine a las computadoras hacer lo que me habían dicho cuando sentí una mano cálida tomar mi cintura.

-relájate, púlpito, ahora somos colegas no solo compañeras de cama- dijo Martina con una sonrisa de oreja a oreja, no pude responder cuando la vi alejándose.

Que mierda es esto?! Esta mujer me va volver loca, y trabajar acá con ella esto no iba ser bueno.

-ah por cierto- grito desde fuera- Josue despertó!