Capítulo 1

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-¡Norah! ¡Date prisa o llegarás tarde otra vez!

Escucho por enésima vez a mi madre en el piso de abajo. No le respondo, simplemente continúo arreglándome frente al espejo hasta que me siento satisfecha con cómo me veo. Salgo del baño y tomo mi bolso antes de bajar las escaleras, entro en la cocina y tomo la bolsa de mi almuerzo antes de caminar hasta la puerta.

-Norah, no puedes seguir saliendo tan tarde de casa, no sólo te retrasas tú, sino que también retrasas a tu hermano.

Consigo a Alex recargado sobre la pared con su mochila en sus hombros, él me regala una pequeña sonrisa y le sonrío de vuelta.

-Nah, mamá. Él va a estar bien. -Le contesto y le doy un pequeño empujón en la cabeza a mi hermano antes de salir ambos de casa.

Al vivir tan cerca de la escuela, no nos dejan otra opción que irnos juntos caminando, no entiendo para qué tenemos un maldito auto entonces. No puedo esperar a que el próximo mes de clases pase rápido y poder graduarme de esa porquería de instituto. Observo a mi hermano y rodeo sus hombros con mi brazo, es bastante alto para tener tan solo dieciséis.

-¿Listo para otro aburrido y monótono día de clases? -Le pregunto, él me sonríe levemente.

-No es aburrido, al menos no para mí.

Él contesta y yo río ante su comentario antes de darle un pequeño empujón.

-Es en serio, Alex. No sé cómo es que somos hermanos.

Él suelta una pequeña risa.

La verdad es que Alex y yo somos polos opuestos. Él es el hijo perfecto, buenas calificaciones, buen aspecto, responsable, ordenado y amable. Yo detesto la escuela, detesto a la gente y detesto estudiar, pero la verdad, me importa una mierda.

Seguimos el camino cuando siento mi celular vibrar.

-¿Hola? Sí, ya estoy pasando por tu casa, está bien.

Cuelgo la llamada y Alex me mira nuevamente.

-¿Stella?

Yo asiento. No pasan muchos minutos en cuanto mi mejor amiga corre hacia nosotros con su desordenada y llamativa cabellera color rosa intenso. Ella nos sonríe ampliamente y comienza a caminar junto a nosotros.

-Buenos días, Norah, Alex.

-Buenos días, Stella.

-Buenos días.

-A que no sabes quién audicionó para el festival de talentos. -Ella pregunta y ambos dirigimos la mirada sobre ella.

-¿Tú? -Pregunto, ella asiente.

-Sí. Tengo la esperanza de ganar algo antes de graduarnos.

Ella sonríe entusiasmada y yo sonrío de vuelta, a veces Stella es demasiado alegre, no entiendo cómo puede estar todo el tiempo feliz. Ella continúa hablándonos sobre el concurso de talentos hasta que finalmente nos encontramos en el patio de la escuela.

-Bueno chicas, las veo luego.

Alex se despide con una sonrisa y se marcha hasta su salón.

-Bueno, debo irme.

Clavo mi mirada sobre ella y me sonríe.

-¿No vas a clases?

Ella niega con la cabeza.

-No, debo ir a ensayar con la banda.

Yo suspiro y la fulmino con la mirada.

-Gracias, Stella. Me agrada saber que estaré de nuevo sola en ese salón lleno de gente idiota.

Rendezvous.  |L.T|Where stories live. Discover now