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Era una tranquila mañana de sábado, ayer viernes habia estado con Allen y Máx paseando por el parque mientras hablábamos de trivialidades.

Me dispuse a limpiar un poco ya que la casa estaba hecha unos zorros pero sentí la llamada de la naturaleza y tuve que correr al baño

Salí a la media hora y limpie la casa, quitando el polvo de los muebles y limpiando las complicadas lozas del suelo y poco después estaba con Max en un restaurante para comer, y que todos los sabados solíamos ir a comer a un restaurante que quedaba por aqui cerca.

Pedimos unas coca colas mientras esperabamos unos platos de pasta con tomate y carne.

Llegaron a los 15 minutos y los devoramos como si no hubieramos probado bocado en una semana, terminamos de comer y nos fuimos a ver que le pasaba a Allen.

Entramos en su casa ya que cada uno de nosotros tiene llaves de la casa del otro y vimos a un Allen mustio tirado en el sofá con un montón de pañuelos y su alrededor.

- Allen, ¿qué te ha pasado ?

- ¿No es obvio?

- ¿Te ha entrado un duendecillo en la nariz y estás intentando que salga?

Allen soltó una carcajada, provocando una pompa de mocos en su nariz

- No me ha entrado ningún duende, me he resfriado, idiota

- Aaa, pues bueno ya estamos nosotros aqui para hacerte compañia.

Me golpeé en el pecho y lo rodee con el brazo sentándome en el sofá con él, ignorando los pañuelos verdosos.

Estuvimos un buen rato hablando sobre aquella chica que tanta intriga habia dejado en nosotros.

Despues de estar hablando con el nos fuimos cada uno a nuestra casa ya que habíamos decidido que iríamos a una discoteca.

Nos fuimos sobre las 10:30 de la noche, la pasamos entre bebidas, bailes, y estornudos de Allen (además de intentos patéticos de Max por ligar) y volvimos a las 5:30 de madrugada, ligeramente borrachos.

Foto de Dylan( Cameron Dallas ) en multimedia.

Perritos apachuchables para todos.

Say GoodByeWhere stories live. Discover now