Ethan le dio su mejor sonrisa encantadora. -¿Te dije cuán guapo te ves hoy?

-Eso no funciona conmigo y lo sabes-contestó. -Díganme por qué sintieron la necesidad de arrastrar a su hermana lejos de sus amigos y forzarla a entrar al auto. Pensé que los había criado para ser unos caballeros.

-Lo somos-protestó Leo. -Pero esos pequeños cretinos que se la comían con los ojos no lo son. Tu sabes cómo son los chicos a esa edad.

-Sí, lo sé-dijo Stiles. -Así que, si Sophie no puede tener amigos en la escuela, ustedes dos no pueden tener amigas fuera de la escuela. Ustedes saben cómo son los chicos a esa edad.-Lo miraron boquiabiertos. -¿Así serán las cosas?-preguntó.

-Perdón, Sophie-contestaron los dos.

Sophie seguía sin verse contenta. -Me avergonzaron delante de mis amigos.-Los dos odiaban cuando ella se enojaba con ellos.

Ethan suspiró. -¿Y si te llevamos a ti y a tus amigas al cine para arreglarlo?

-Incluso sufriremos con una película de chicas, pero nos sentaremos en una fila diferente de ustedes. No voy a pelear con esas aprovechadas de trece años-se estremeció, pensando en la última vez que Sophie tuvo una pijamada. Ambos, él e Ethan, eran considerados unos rompecorazones en preparatoria, así que tuvieron que mantenerse encerrados durante la noche para escapar del montón de risueñas niñas.

-Trato-sonrió Sophie. -Y prometo que si un chico me llega a molestar, estaré contenta de que lo golpeen.

Stiles intervino. -Es un problema resuelto.-Se giró hacia Evan. -Scales se salió de su jaula otra vez.

-Papi, simplemente le agradas. No puedo evitar que seas tan genial que todos quieran estar a tu alrededor-dijo Evan. Ese chico era un pequeño lambiscón.

-Tal vez debería empezar a ser estricto. Eso arreglaría ese problema, ¿no crees?-preguntó.

-Tendré más cuidado-concedió.

Mikayla sonrió adorablemente cuando Stiles se giró hacia ella. -Feliz cumpleaños, papi.

-Tu tía Lidya me llamó hoy. ¿Tapizaste de papel higiénico el baño de los niños?-preguntó, cruzando sus brazos sobre su pecho.

-Me dijiste que no dijera mentiras, así que, ¿me puedo saltar esa pregunta?-contestó Mikayla.

-Ayudarás al conserje el lunes, mientras tus hermanos están en la práctica de fútbol.-Mikayla hizo un puchero, pero Stiles simplemente sacudió su cabeza. -Te he dicho en repetidas veces, que si vas a hacer cosas como esas, no dejes que te atrapen.

-Sí, señor-suspiró.

Stiles sonrió. -Ahora, es mi cumpleaños. ¿Gente, por qué no me están abrazando en este momento?-Reí mientras veía que lo atrapaban en medio de su abrazo grupal. -¡Hey!-me gritó. -Tú no estás exento de esto, tampoco

-Sí, papá-dijo Leo. -Ven acá.-Abrió su brazo para hacerme espacio entre él y Sophie, y agradecí felizmente. Mi familia era ruidosa, loca y perfecta.

-Hablando de cumpleaños,-sonreí. -Todos estarán aquí en una hora, así que ustedes, chicos, deben tener su tarea lista para entonces.-Hubo un gemido colectivo mientras los chicos se dirigían al comedor y esparcían sus libros. Nunca comíamos ahí, así que fue algo bueno que ellos le encontraran un uso a esa mesa.

Stiles enrolló sus brazos alrededor de mi cintura y descansó su cabeza contra mi pecho. Vimos a Sophie ayudarle a Mikayla con su tarea de Matemáticas. Nadie había estado más emocionado que Sophie cuando supimos que Stiles estaba embarazado de una niña. Por supuesto, peleaban como la mayoría de las hermanas lo hacen, pero nunca duraba demasiado.

Stiles Stilinski: SecuestradorWhere stories live. Discover now