-Eso suena bien-accedió antes de sentarse. -¿Qué hay para hoy?-preguntó mientras se estiraba.

-Planeaba molestarte todo el día. ¿Es eso un problema?-ni siquiera se me ocurrió que él podía tener planes.

Stiles sacudió su cabeza. -Tengo un pequeño problema que arreglar, pero eres bienvenido para unírteme.-Se deslizó de la cama y fue al baño para lavarse los dientes.

-¿Este problema hará que nos arresten?-pregunté.

-No si logramos que no nos atrapen-contestó. Salió del baño y fue hacia su guardarropa. -No haremos nada que merezca que vayamos a prisión-prometió.

Eso me hizo sentir mejor. -¿Y qué tienes en mente?

Apareció completamente vestido de negro con un pequeño pedazo de papel en sus manos. -¡He aquí!-lo sostuvo frente a mí, -La lista negra.-Le di un vistazo rápido para asegurarme de que mi nombre no estuviera ahí. La mayoría de los nombres estaban tachados, pero había dos que reconocí que no lo estaban: Liam y Theo.

-¿Por qué Theo está en tu lista negra? Pensé que era tu mejor amigo-dije, no es que me importara, por supuesto. Me hacía feliz que él estuviera ahí, y yo no.

-Cuando supe que estaba embarazado de Leo, él envió un video al show de Maury a uno de esos episodios de 'Ayúdame a encontrar al papá de mi bebé'-explicó. -No me malinterpretes; me gustan las buenas bromas. Me encabronó que se mudara a la universidad antes de que pudiera devolvérsela. Tiendo a ser rencoroso.-Tomó una bolsa de lona y la echó sobre su hombro. -¿Listo?

Ni siquiera sabía en qué me estaba metiendo. -Seguro.

Un adecuado día de venganza no podía empezar sin un desayuno saludable, así que iniciamos yendo a una cafetería. -A pesar de que tu diabólica cuñada me atacara esta mañana, creo que fue muy dulce que incluyera a Leo-admitió. -Él nunca se queja, pero sé que a veces desearía tener una familia más grande. Antes de mudarnos para acá, él solo me tenía a mí, a John, y a veces a Liam. Claudia y Daniel salen de viaje un montón, así que él sólo los ve en las vacaciones.

-¿Qué harías si su padre biológico aparece de repente?-pregunté. Era algo que me había estado molestando.

-Hice todo lo que pude para encontrarlo. Todos en el país supieron de mi alegre episodio en el baile de máscaras. Cuando él nunca apareció, John y yo fuimos capaces de encontrar un abogado y me aseguré de que tuviera la custodia completa. No quería preocuparme porque él se presentara años después, listo para jugar al papi. Leo merece algo mejor que eso.-Tomó un sorbo de su café. -Para contestar tu pregunta, si él se aparece, le patearía el trasero.

Sonreí y pagué la cuenta. -¿Listo para tachar otro nombre de tu lista negra?

De camino al gimnasio, él me explicó su plan. -La manera de ir tras Theo es con algo pequeño que no note de inmediato. Con algo grande y extravagante, él encontraría la forma de voltearlo y usarlo para su beneficio.-Obviamente, había pensado demasiado sobre esto. -Él es un tipo muy tranquilo. La única cosa que le preocupa es su camioneta. La revisa casi cada quince minutos. Esa cosa es como la clave de su masculinidad o algo así. Se enorgullece de ser un macho moderno, así que ahí es donde tienes que atacar.

-Me siento un poco nervioso por el tipo-admití.

-Eso es muy malo, porque necesito que vayas adentro y lo mantengas distraído por al menos veinte minutos. Tal vez podrías disculparte por el malentendido de anoche-sugirió.

Ni siquiera quise preguntar qué iba a hacer. Me imaginé que entre menos supiera iba a ser mejor. Caminé hacia dentro del gimnasio, buscando al objetivo. La chica en la recepción me señaló su oficina, así que me paseé por ahí y golpeé la puerta.

Stiles Stilinski: SecuestradorWhere stories live. Discover now