Comenzó la guerra.
A donde mirarás había muerte, pero lo único que me importaba era encontrar a Luciérnaga.
Corrí, llegué al castillo de las luces, me deshice de los guardias y la encontré.
Ella se dio vuelta junto con todos los presentes al escuchar el ruido de la puerta.
Observé la situación y me puse como loco.
¡¿Cómo se atreven a lastimarla?!
Estaba herida por varias partes.
¡¿Que le habían hecho?!
—¡Voy destruirlos a todos! —grité furioso.
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Casada con la oscuridad
Kort verhaalUna novela en pequeños párrafos donde la oscuridad y la luz contarán su versión de la historia, ¿pero por qué te lo estoy contando yo? Ellos mismos pueden contártelo. Narra Luz. ―La oscuridad, la oscuridad que me persigue, me he casado con la oscuri...
