Sobrevivientes ©

Capitulo 11

Corrí lo más rápido que pude dejando a Brian y Sophie detrás de mí, tenía que encontrar a Nick cueste lo que cueste, no sé qué haría sin él. Sentía que ya no valía la pena seguir corriendo, que seguramente Nick estaba muerto pero seguí corriendo a no sé dónde y encontré un río, pero eso no es lo que importa, lo más importante era que había unas carpas, en ese momento dentro de mi corazón sentí que todavía había esperanza de encontrar a Nick. Me acerqué a las carpas. Eran altas, de un color anaranjado, que parecían estar en uso desde hace mucho. Me acerqué lo más que pude hasta que oí una voz suave, de un chico de al parecer 13-14 años, trate de hacer el menor ruido posible para no ser descubierta por ese niño que jamás había visto, me agache para ver por debajo, me intrigaba saber quién era ese chico. Pero me paso lo más común en todas las películas: me tropecé, dejando sonar un ruido tan fuerte que hasta Sophie y Brian podrían haber escuchado desde donde estaban.

Me largué a correr, esta vez sí me cansé demasiado pero seguí corriendo, no sabía quiénes eran estas personas ni sabía que harían si me veían. Vi un árbol grande donde esconderme, y eso es lo que hice. Me senté detrás del árbol esperando que ese chico no me haya perseguido, pero espere lo incorrecto. Escuche unas pisadas, que cada vez se escuchaban más y más lejos. Cuando ya no las escuche más, salí de mi escondite con el máximo cuidado y sin hacer el mínimo ruido, y al ver que no había nadie decidí volver a esas carpas. Todavía no puedo dejar de pensar en esa voz tan suave.

No sé a donde ir, estaba tan apurada que ni siquiera pude recordar en donde estaban las carpas, entonces me senté, en una roca, en el medio de la nada, quien sabe dónde, a pensar. Creó que pasó menos de 10 segundos cuando mi tranquilidad se desvaneció enseguida. Escuche unos ruidos raros como si alguien se estuviera acercando cada vez más hacia mí.

- ¿Hola hay alguien? ¿Qué fue ese ruido? –

- Ven no te haremos daño. – dijo esa voz suave que no me podía sacar de la cabeza.

Y acto seguido a esta frase, de entre medio de las hojas y árboles, salió un chico. Debe tener 15 años, es alto, tiene pelo rubio y ojos azules tan hermosos que ni siquiera puedo dejar de verlos, una voz muy suave y una sonrisa tan pero tan hermosa que casi me desmayo al verla. Llevaba puesto unos jeans que al parecer estaban limpios y en un muy buen estado aunque este medio desgastado y una remera roja completamente limpia.

- ¿Cómo es tu nombre? – me pregunto mirándome a los ojos.

- Soy a... soy Amy –

- Yo soy Kevin gusto en conocerte – dijo estirando la mano como para que lo saludara, pero yo ni me moví.

- ¿Tú...tú eres el de las carpas? –

- Así que vos fuiste quien estuvo espiando...? - me dijo con una sonrisa inmensa en la cara.

- Emm... si pero fue sin querer.... Digo que... que si yo...puedo ir con...vos...-

- ¿Qué? ¿Quieres venir a nuestras carpas? –

- Sí, pero ¿cómo NUETRAS? –

- Mira, yo no soy el único, hay más y si quieres quédate, te daremos comida, ropa y una carpa, pero claro, primero debes ser aceptada por el líder.

- ¿Líder? Bueno.

Kevin me llevo hasta las carpas donde estaba "El LIDER". Entré a la carpa anaranjada y el líder me miro con cara de enojo. Él era mayor de edad unos 30 años, pelo castaño y ojos verdes. Llevaba puesto ropa sucia parecía que no se había bañado hace siglos.

- ¿De qué vuelo sos? ¿Cómo nos encontraste? ¿Hay alguno más? ¿Cómo llegaste a esta isla? ¿Tenés algún modo de comunicarte con los OTROS?

- Emmm... bueno me llamo Amy, mi vuelo era el 340 y se cayó justo aquí, en la isla. Si hay otros sobrevivientes pero no sé dónde están ahora. Estaba buscando a alguien, mi novio y me perdí y así llegue hasta aquí. Y... ¿Quiénes son los OTROS?

- Los OTROS son los que están en la ciudad... soy de Florida, Miami y mi vuelo se cayó justo aquí, en el avión yo viajaba junto a mi hermano por trabajo, pero falleció cuando la tragedia sucedió. Mi nombre es Philip. No me puedo olvidar de mi hermoso sobrino... él era tan adorable... ¿Qué será de él ahora?

- ¡Yo también soy de Florida! ¿Cómo se llamaba su sobrino?

- Nicolás pero todos le decían Nick.