You Belong with me || Ángelo Henríquez

2: "Retos y Disculpas"

—Pero yo no era la persona ridícula que tenía una manguera en la cabeza—dijo burlándose de mí e imitando mi voz.

—Yo no hablo así—le dije cruzando mis brazos poniendo mi mejor pose de enojada.

—Ángelo culiao, deja de molestar a esta pobre chica—dijo Eduardo.—Oye ¿Cómo te llamas?

—Javiera—le dije casi gruñendo. Él no tenía la culpa, pero es que yo estaba enojada con su amigo.

—Oye yo no tengo la culpa, de que este hueón sea tan imbécil—dijo refiriéndose a su amigo, quién lo fulminó con la mirada—Ángelo tienes que cambiarte antes de que don Sampa te encuentre así—luego miró a mi espalda algo y dijo—Oh, oh creo que ya es tarde, mejor yo me viro—dijo saliendo corriendo de ahí, dirigiéndose al lugar desde dónde venía. Ángelo y yo nos giramos para ver que había visto Eduardo y era nada más ni menos que Jorge Sampaoli, el director técnico de la selección Chilena, quién nos miraba con el ceño fruncido.

—Ángelo, ¿Qué significa esto?—dijo notablemente enojado—y ¿Quién es esta señorita?

—Profe, yo con el Edu, le queríamos hacer una broma al Marcelo, entonces vine a buscar la manguera, y la manguera se poseyó y me mojó entero—dijo poniéndole dramatismo a su relato—y en cuanto a esta mina—dijo mirándome despectivo—yo no sé quién chucha es.—la mirada de Sampaoli se dirigió a mí.

—Sr Sampaoli, yo vine aquí con el Dr. Krausse—dije sin darle muchas explicaciones, pues supongo que él sabía, Ángelo me dedicó una mirada inquisitiva como para que explicara que hacía yo aquí, pero la ignoré completamente.

—Krausse—gritó Sampaoli—¡Krausse vení aquí!—unos segundos después apareció mi profesor, casi corriendo. Cuando llegó y vio la escena que tenía frente a él su rostro se transformó, nunca lo había visto así, se notaba que estaba recontra furioso.

—¡Qué está pasando aquí!—preguntó mi profesor, directamente a mí.—Javiera responde—dijo frunciéndome el ceño

—Me estaba arreglando el pelo, con el agua de esa manguera y luego vino este—dije apuntando a Ángelo—y dio TODA el agua, me mojó entera—suspiré. Mi profesor miró con cara de amenaza a Ángelo.

—Henríquez, ¿Por qué mojaste a mi alumna?—le dijo amenazante

—Ay ya ¿saben qué? me aburrieron, yo no hice NADA, esta mina loca está haciendo todo un escándalo, por una tontera—dijo el jugador que estaba a mi lado.

—Henríquez esa no es forma de tratar a Javiera—le respondió mi profesor.

—Cálmense todos—dijo Sampaoli—Ángelo ve a cambiarte y luego a mi oficina—lo apuntó a lo que Ángelo suspiró y se retiró.-Y vos Krausse, dale una ropa de cambio a la señorita—Luego Sampaoli, se retiró del lugar dejándome sola con la furia de mi profesor.

—Sígueme—dijo simplemente. Lo seguí obedientemente. Me llevó a una especie de oficina que decía en la puerta Dr. Kristian Krausse, traumatólogo. Sacó de un armario una ropa, era un buzo de la selección chilena.—Ve a cambiarte al baño y luego hablamos— se sentó en la silla detrás del escritorio. Mientras yo iba en dirección al baño que ahí había.

                 Me cambié ropa, la cuestión se ve me veía horrible, me quedaba gigante, por lo menos el pantalón tenía un cordón para ajustar la cintura, así que no se me caía, pero igual parecía cualquier cosa, pero bueno no tenía alternativa. Salí del baño con mi ropa mojada en mi mano.

—Deja esa ropa ahí—dijo mi profe indicando un balde que ahí había—Ahora siéntate—le obedecí—Mira Javiera yo te traje aquí porque eres una de mis mejores alumnas, yo no puedo creer que me hayas mentido acerca de esa llamada para irte a coquetear con los jugadores de la selección— dijo enojado.