Begging For More Of You

Capítulo 3

-Vamos Harry, ¡deprisa!, no me quiero perder la función -me grita mientras corremos por las calles de la ciudad intentando llegar a nuestro destino.

-Solo vamos a ver actuar a unos niños de cinco años, Herms. No es para tanto -le contesto divertido al ver su entusiasmo.

-¡Claro que es para tanto!, ¡Son los hijos de George!, además, tengo ganas de ver a la familia Weasley.

-Pues yo no... -bufo molesto.

Ambos estamos parados esperando a que el semáforo para peatones nos deje cruzar al otro lado.

-Harry -me llama con su dulce voz-, no te preocupes por Ginny, ¿vale?

Yo asentí con la cabeza. Ella me cogió de la mano y cruzamos el paso de cebra una vez el semáforo estuvo en verde.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

La función fue todo un éxito.

Eso es lo que me hubiera gustado decir, pero por desgracia no fue así.

La función fue un desastre, ¿pero qué se iban a esperar de niños de cinco años y menores de esa edad?

En fin...al acabar la función nos fuimos con los Weasley a cenar. Molly; la madre de Ron y por ende la madre de sus hermanos (Fred, George, Ginny, Charlie, Bill y Percy) [NA: creo que están todos pero aún así...any way jajaja] fue la que nos recibió, como siempre, de una forma bastante afectuosa.

Ginny no nos quitó el ojo de encima desde que llegamos.

Noté como miraba a Herms con odio, cosa que no me agradó nada.

Toda la familia Weasley saben el motivo por el cual Ginevra y yo rompimos, pero aún así Molly sigue intentando que volvamos a estar juntos.

Por eso se me ocurrió decir que Hermione y yo estábamos saliendo formalmente, que es cierto, cuando terminara la cena.

-¿Recuerdas cuándo Snape, nuestro profesor de química, nos dejó fregando el suelo por hacer mal un experimento? - pregunta Ron riéndose como morsa retrasada.

Yo también me reí.
Pero más por su risa que por el recuerdo que contó.

-Eran buenos tiempos - comenté viendo a mi Herms con una sonrisa.

-Lo eran Potter, lo eran... - contestó mi pelirrojo amigo.

-¿Y qué hay de ti Hermione?, ¿sigues siendo la zorra que eras años atrás? -Pregunta una Ginny bastante molesta mientras corta su rosbif.

Hermione se atraganta con el agua que estaba bebiendo.

-¡Ginevra Weasley! ¿cómo te atreves?, ¡discúlpate ahora mismo! -La regaña Molly, y menos mal que le gritó ella y no yo, por que si yo lo hacía ardería Troya.

-Pero si no he dicho nada malo -se excusa con voz de niña buena y cara de santa. Sera zorra la muy...

-Ginevra Weasley, no te lo vuelvo a repetir, discúlpate con Hermione A-HO-RA.

-Esta bien... -contesta fastidiada- Hermione...lamento que seas tan zorra y estúpida, además de que eres un horror para la vista.

-¡Ya está bien! -Grité yo para sorpresa de todos haciendo que clavaran sus miradas en mi persona-, ¡no te permitiré que insultes a mi novia de esa forma!

-No seas patético Harry...yo soy tu novia, no esa zorra a la que llamas mejor amiga.

-¡Cállate! -Volví a gritar haciendo que los vasos y los platos de la mesa comenzaran a temblar debido al golpe que di en la mesa-, ¡no tienes ningún derecho a hablarle así!, ¡ella tiene mucho más de mujer en un dedo que tu en todo tu cuerpo!

-¿Por qué la defiendes a ella, cariño? -Pregunta de nuevo haciéndose la víctima- ¡tú me quieres a mi, no a ella!, ¡yo te amo!, ¡Nos amamos!

-Corrección: amas mi dinero. Yo te quise, pero tu nunca amaste, ni si quiera un simple afecto o cariño hacia mi. Además...yo siempre he estado enamorado de Herms, la amo más que a mi vida y eso no lo vas a poder cambiar.

-Pero... -protesta.

-Gracias por esta maravillosa comida Señor y Señora Weasley. Lamento haber montado todo este espectáculo. Mejor será que Hermione y yo nos retiremos, ¿nos vamos, Herms?

-Ya voy cariño... -me tomó de la mano y salimos de ahí después de despedirnos de absolutamente todos menos Ginevra.

Esa chica tiene la maldad en sus venas.