"El amor es... problemático" (L.Joe, Teen Top)

Capítulo 1.- "Las personas cambian".

Capítulo 1.
"Las personas cambian".

Mi vida actualmente es un completo desastre. Mi nombre es Emily McCrackin, tengo 20 años y curso el primer año en la universidad.

Comencé a arruinar mi vida cuando iba en secundaria, tenía 13 años en ese entonces y mi padre acababa de morir. Era un hombre muy tranquilo y paciente y era el único que me ayudaba en la difícil etapa de la pubertad a la adolescencia.

Fue algo que le afectó a toda la familia, mamá tuvo que comenzar con los turnos dobles y horas extras para lograr mantenerme a mí y mis hermanos menores, ella no quería depender del dinero del seguro de vida de papá, además de que no nos duraría toda la vida. Tomé las cosas verdaderamente mal. Había mucha ira acumulada en mí. Mi padre era un buen hombre, y por culpa de un idiota que no respetó la luz roja del semáforo él ahora estaba muerto, la vida no era justa, ¿de qué servía ser buena persona?

Y todo comenzó una semana después del funeral, mis clases habían terminado y me dirigía a casa, dos sujetos de mi clase liderados por uno más alto comenzaron a seguirme y a fastidiarme, lo que no ayudó mucho a la ira acumulada en mi, por lo que impulsada por el enojo de la muerte de mi padre golpeé al sujeto rompiéndole dos costillas y fracturándole la nariz, me deshice de los otros dos antes golpeándolos en la parte más sensible de todo hombre con una fuerte patada.

Así fue como inició mi vida como delincuente, mis calificaciones no se vieron afectadas de ningún modo, pero ya era costumbre que saliendo de clases peleara con sujetos y las hermanas mayores de estos.

Muchas peleas las perdí y muchas también gané, pero jamás me quedaba con las ganas de golpear a alguien. Inicié el bachillerato y fue ahí donde me involucre sin querer con pandillas. Después de darle una paliza a un sujeto que resultó ser el numero 7 de una pandilla que se hacía llamar "Los 7", me convertí en la séptima de este grupo delictivo, no sabía nada de eso hasta que el líder y su hermano, el número 1 y 2 respectivamente, me buscaron para informarme que era parte de su grupo.

Unos meses después ya era la número 3, no subí mas ya que uno era el líder y el otro su hermano. El número uno me enseñó a pelear mejor pues él practicaba artes marciales y decidió enseñarme algunas técnicas para pelear mejor. Cuando tuve 18 años comencé a salir y participar en peleas callejeras, lo hacía más por gusto que por ira, había superado ya la muerte de papá.

Ganaba buen dinero con las apuestas de las peleas en las que salía victoriosa; mi relación con mamá no era muy buena y casi no pasaba tiempo con mis hermanos pues no estaba en casa en todo el día, solía llegar a casa a altas horas de la madrugada ebria y con olor a humo de cigarrillo, tumbandome a dormir en mi sillón en la sala.

Así era mi vida, antes de darme cuenta me gradúe y entré a la universidad muy dificultosamente, el problema no eran mis notas si no mis antecedentes de mal comportamiento. Fue en el transcurso de mi primer año en la universidad (y otro suceso del que hablaré después) cuando ocurrió algo que me hizo cambiar. Iba a pelear contra otro sujeto al terminar mis clases, a donde iba los problemas me seguían, pero una llamada de mamá me impidió mi combate, ella se quedaría a doblar turno y no podría ir por mis hermanos a la escuela así que me obligó a que fuera yo por ellos.

Al día siguiente me enteré que mi rival quería ser uno de "Los 7" y peleó contra el séptimo en lugar de mi. El séptimo, Nate Cold, estaba en coma a causa de un mal golpe en la cabeza durante la pelea. Ese suceso me hizo "madurar" más rapido de lo que intentaba, esa pude ser yo. Si yo estaba en coma mamá tendría que pagar una fortuna en el hospital y descuidar a mis hermanos, por lo que decidí poner más empeño en mejorar mi vida del que hacia.

Pasó así un mes y medio, pero los problemas se empeñaban en seguirme. Comencé a hablar más con mamá, ella fue muy comprensiva conmigo y me apoyó en todo momento, al igual que la únicas dos amigas que tenía en la universidad. Jannete Rivers Y Jane Watson. Jannete era alta, de cabello y ojos castaños y pechos grandes. Había conseguido el puntage más alto en el examen de ingreso, yo el segundo lugar.

Aún no entiendo por qué comenzó a hablarme a mí, la chica problema, pero lo hizo y se volvió mi mejor amiga. Jane era la tipica chica rubia y popular, comenzó a hablarme a mi y a Jannete por ser las chicas más inteligentes de toda la universidad ya que ocupaba ayuda con los estudios, y sin darnos cuenta nos hicimos amigas. Un grupo raro de amigas: la inteligente, la problemática y la popular. Aún así nos llevábamos bien y me apoyaron cuando decidí ser pacifista.

Como mencioné antes los problemas me seguían. Hace dos días despidieron a mamá de su trabajo, aprovechando esto y que yo quería alejarme de los problemas tomó la decisión de vender el pequeño departamento donde vivíamos los cinco e irnos a vivir con la abuela al campo, para empezar desde cero. Me sentí culpable por mis hermanos, a diferencia mía vivían muy bien y ya tenían su vida hecha; mamá habló con ellos, no les dijo lo que ocurría conmigo respetando nuestras charlas privadas. Ellos no tuvieron opción mas que aceptar no muy convencidos. Mamá encontró pronto un comprador, por lo que en cuanto termine el ciclo escolar nos iríamos de esta ciudad, lo cual sería en dos días.

Pensé que tal vez debía hacerle un cambio a mi imagen, en mi etapa de rebeldía me adentré al mundo del rock hardcore y rock punk por lo que teñi mi largo cabello de azul y me puse un piercing del lado derecho de mi labio inferior, usaba un grueso delineado negro alrededor de mis ojos resaltando más el azul de éstos y mi blanquecina piel. Desheche la idea del cambio de imagen así de rápido como vino pues me gustaba cómo me veia, aunque las demás personas me vieran como bicho raro. Dos días, dos días para mi nueva vida...