Erase una vez..

Capitulo 23- La pelirroja

-¿Para que?-Pregunto nerviosa.

-Solo dilo.

-Ethan.

-Me encanta como suena mi nombre saliendo de tus labios.-Dije susurrándole al oído y mordiéndole el lóbulo.

-No seas idiota.-Contesto empujándome.

La mire, y parecía un tomate de lo roja que estaba. Comenze a reír.

-Ya, solo lo hice para molestarte.-Señale su cara.-Mira lo roja que te pusiste.-Dije burlándome.

Ella se puso aun mas roja de lo que ya estaba, si es que eso era posible, se tapo la cara con las manos y se dio vuelta.

Yo la abrace por la cintura.

-No te enojes, solo fue una broma.-Bese su mejilla.-No salgas con Peter, me voy  aburrir yo solito.

-Llama a Calum o a los chicos.-En su voz se notaba lo incomoda que la ponía.

Hoy descubrí mi nuevo pasatiempo, esto de ponerla nerviosa, hacerla sonrojar o incomodarla es divertido; no se como no me di cuenta antes.

-Hoy todos están ocupados. Vamos a tomar un helado ¿Si?

-No voy a cancelarle a mi novio por ti.

La solté rápido y fruncí el ceño.

-¿Lo prefieres a el?

-Ya eres grande para hacer berrinches Ethan, por que no vas con tu NOVIA.-Recalco la palabra Novia.

-Esta bien, tu te lo pierdes. Iré con ella.

-No me pierdo de nada créeme.

Salio de la cocina, y subió a su habitación.

Juro que cada minuto que pasa odio mas a ese estúpido. Y no tiene nada que ver que sea el novio de Megan con que lo odie.

Es solo que me molesta hasta que respire.

...

Estaba terminando mi desayuno cuando el timbre sonó.

-SIMIO ¿PUEDES ABRIR?-Grito Megan desde arriba.

-NO PUEDO ESTOY MUY OCUPADO.-Grite yo acomodándome en la silla.

 -ETHAN ABRE, SI ES PARA MI HAZLA PASAR.

-Que molesta.-Masculle levantándome.

Abrí la puerta y me encontré con una chica pelirroja que me parecía conocida.

Era linda pero no tanto como Meg. 

¿Por que dije eso?

-Y tu eres....

-Venecia Domenech. Pero creo que me equivoque, buscaba la casa de Megan West.-Dijo un poco nerviosa.

Ya recuerdo quien es, es una de las mataditas de la universidad.

-Aquí vive, si quieres puedes esperarla adentro se esta cambiando.

-Bueno, gracias-Contesto pasando.

-Siéntate allí, ella ya viene.

La deje sentada en el sofá y volví a mi desayuno.

No termine de sentarme cuando el timbre volvió a sonar.

Me levante de mala gana ¿Es que hoy es el día de no dejes que Ethan termine su desayuno?

Abrí la puerta y Calum entro directamente y fue hasta el sofá.

 Pero se quedo quieto como si hubiera un fantasma.

-Si claro, pasa y siéntete como en tu casa.-Dije sarcásticamente.