CODIGO AXE

04: BIP-BIP

—Última noticia, en horas de la mañana la sede de entrenamiento a las afueras de Nova fue arrasada por una explosión masiva, el grupo de rescate encargado junto con el cuerpo médico se encuentra haciendo un escaneo del lugar, hasta el momento se han encontrado dos cadetes y un suboficial gravemente heridos. Se desconoce la cifra exacta de las víctimas pero se estima que alrededor de 250 personas estaban en el lugar. CHF tiene en exclusiva un comunicado del General Alexander Visconti, adelante con las imágenes.

Después de unos segundos aparece la imagen de aquel fornido hombre, a simple vista; impecable desde su canoso cabello muy bien peinado hasta su pulcra camisa blanca, aunque los años se reflejan en sus ojos su porte no pierde fuerza.. Sus ojos color miel relucen más gracias a la luz de los reflectores.

—De momento, se desconoce cómo ocurrieron los hechos, en primera instancia se sospecha que es obra del Clan Axe; esta es una declaración de guerra y la comunidad puede tener la certeza que la UEA no se quedará de brazos cruzados, garantizamos que los responsables enfrenten las consecuencias.

Oprimí el botón del control remoto para apagar la televisión, esto es absurdo. ¿Está permitido soltar conjeturas al aire? apenas han pasado veinticuatro horas, ¿cómo puede estar seguro de quienes fueron los responsables si ni siquiera se ha acercado al lugar de los hechos?

Salí de la clínica móvil apenas depositamos al primer superviviente, un sargento que estuvo sepultado bajo un montón de escombros en la entrada de uno de los edificios, pese a una posible contusión y algunos golpes, no se ve tan mal, o eso espero.

El caos reina en el lugar; una densa capa de humo nos rodea en conjunto con estridentes sirenas sonando, gigantescos chorros de agua saliendo de los camiones de bomberos y un mar de gente corriendo de un lado a otro.

—Teniente, tiene que ver esto —Ryan me muestra la pantalla donde monitorea lo que el dron muestra una imagen térmica en tonos esmeralda entre los terrenos irregulares a unos metros de nosotros debajo de algunos escombro se visualiza una pequeña luz roja intermitente. Ryan no tuvo que brindarme alguna explicación, aquella luz indicaba la cuenta regresiva de un explosivo. Casi pude sentir aquel agudo pitido aturdiendo mis oídos.

Afortunadamente no tuve que dar ninguna orden, Jackson salió corriendo sin dudarlo, directo a la la luz roja, con su maletín negro en la malo, repleto de aquellas herramientas. —Guíame —le gritó a Ryan por medio del comunicador. Este empezó a direccionarlo con exactitud al lugar.

Por mi parte, con los demás nos encargamos de evacuar la zona y formar un perímetro de seguridad alrededor. Luego de unos segundos cavando bajo la intensidad del sol de la tarde, la imagen transmitida por el dron nos mostró el aparato salir a la luz, aquel pitido intensificó su molestía en mis odios.

—Esto es de alta gama, casi puedo asegurar que es tecnología militar —informó Jackson por medio del comunicador mientras a mí se me helaba la sangre y los dedos de los pies se me encogían dentro de la bota.

— ¿Por qué dices eso?

—Por el tipo de material, el serial y que el dispositivo de lectura indica que al mínimo movimiento nos va a volar a todos.

Un silencio sepulcral se apodera de todo alrededor, temo incluso hacer un sonido al respirar que distraiga al experto. El tiempo se detuvo, hasta el humo parece haberse quedado estático, ni siquiera puedo escuchar las sirenas a lo lejos.

Jackson empezó a desatornillar con precisión una válvula interna causando que el pitido aumentara su ritmo.

—Ay no, ay no, ay no —Lila empezó a saltar por todos lados aterrorizada.

El experto soltó el destornillador para proseguir con unas pinzas. El pitido era cada vez más estridente. Una gota de sudor se deslizó a través de mi espalda a medida que el rubio ejercía cierta presión sobre un cable, para cortarlo. Mi corazón dejó de latir y a mis pulmones no les llegó aire en un lapso de segundos que se sintieron como años. Finalmente lo cortó, el pitido cesó.

—- ¡Corran! —Jacksón llegó corriendo hacía nosotros con el dispositivo en su manos mientras embestía a Lila y esta chillaba desesperada por el susto. —Ay, madre santa, casi me hago encima. Pero, orden cumplida teniente.

Me tendió el aparato desactivado. Está demasiado limpia, casi parece recién instalada.

— ¡Eres un imbécil de primera categoría! —Empezó a gritar Lila una vez se deshizo del rubio, y empezó a aplicarle una llave en el brazo. — ¡Te voy hacer tragar esa bomba!

Si el dispositivo no tiene ni siquiera un rayón, quiere decir que no lleva mucho instalado.

Una vez Jackson se libró de la chica, y hubo respirado se plantó frente a mí. —Teniente, si me permite dar una opinión, no creo que el clan de Axe hubiera puesto eso. Yo creo que nos quieren hacer mirar en la dirección equivocada.

— ¿Pero quién querría algo así y por qué?

—Podría ser algo que está pasando aquí dentro y no quieren que salga a la luz. —Agregó Lila desde atrás del rubio.