Dangerous Addiction

Capítulo 7: Como fue que caí por él.

Masajeé mi cuello mientras me dejaba caer en el sofá. Hoy era uno de esos días donde toda mujer quiere llorar y no hacer nada más que estar acurrucada en la cama. El SPM 1 apesta, no solo me hacía sentir terrible, sino que era un aviso de que mis "días rojos" estaban cerca. Por suerte termine con el trabajo por hoy, puedo ponerme llorona y floja en la intimidad de mi habitación. Estire la mano y tome el control remoto. Encendí la televisión y cambie de canal hasta que di en uno de películas de terror. "El exorcismo de Emily Rose" acababa de empezar.

Corrí a la cocina, metí un paquete de palomitas al horno y saque un pequeño pote de helado del congelador. Mientras las palomitas se hacían alimente al hámster, puedo jurar que Pepito me miraba con recelo.

-El sentimiento es mutuo. – Le dije.

Justo cuando me senté en el sofá de nuevo, la puerta se abrió. De inmediato escondí el helado debajo de un cojín. Olivia, Keith y James entraron de una manera ruidosa. Los tres reían de quien sabe qué cosa.

-Hola. – Saludo Olivia entre risas.

-Hola – Murmure.

-Que bueno verte Allison. – Dijo Keith con una sonrisa.

Le sonreí un poco.

-Solo vine a cambiarme, iremos a divertirnos por ahí. – Aviso Olivia avanzando rápidamente a su habitación. – No tardo. – Dijo y desapareció

-¿Quieres venir? – Ofreció amablemente Keith.

-No creo. – Respondió James por mí. – Ella se ve como que ya tiene planes. – Su mirada me recorrió de arriba abajo. Comenzó a jugar con el aro de su labio, ese era un gesto sexy que toda mujer apreciaba. Se cruzo de brazos, uno de ellos estaba lleno de diferentes tatuajes. James era sin duda atractivo de una manera oscura y misteriosa.

-Prefiero quedarme en casa. – Murmure. – Pero gracias por la invitación.

-Sera en otra ocasión entonces. – Dijo Keith.

-¿Qué estás viendo? – Pregunto James divertido mientras se sentaba a mi lado en el sofá.

- El exorcismo de Emily Rose.

Se quedo sentado y ambos vimos la película, comenzamos a comer las palomitas. Después de un rato fruncí el ceño y me incorpore.

-Olivia ya se tardo. – Lo mire extrañada.

-¿Qué? – Pregunto confundido.

-Olivia, dijo que iba cambiarse y salía.

-¿De qué hablas? Ella y Keith se fueron hace como diez minutos. Te dijeron que se iban pero tú estabas embobada con la película.

-¿Enserio?

Puso los ojos en blanco y resoplo.

-Enserio. Ya te dije que deberías usar tu cabecita Allison.

Me cruce de brazos.

-Si ya fueron ¿porque te quedaste? – Inquirí levantando una ceja.

Se encogió de hombros y tomo el tazón de palomitas.

-Eres linda y cualquier cosa es mejor que ver a Keith besar a esa amiga tuya. – Dijo como si no fuera la gran cosa. – Olivia tiene serios problemas, alguien debería decirle que la fortuna es mierda que invento una persona para vender basura como los atrapa sueños, las patas de conejo y demás cosas que en realidad no sirven para nada.

- Olivia me regalo una pata de conejo. – Conté con una pequeña risa.

James frunció la nariz en desaprobación.