Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Cybertron resurgía lentamente de sus cenizas. Tras tantas eras de guerra, al fin los mechs y femmes podían soñar con algo más que batallas: podían construir una vida. Y entre ellos, Ratchet y Tn, dos almas curtidas por el tiempo, encontraban su propio milagro.
La enfermería de Iacon rebosaba una extraña mezcla de tensión y ternura. Ratchet, normalmente el médico más sereno y pragmático, ahora caminaba de un lado a otro del quirófano improvisado, los servos temblándole apenas. Nunca había reparado tanto en cada sonido, cada chispa del monitor. Nunca antes había sentido su spark latir tan fuerte... ni siquiera en las batallas más cruentas.
En la mesa central, Tn descansaba recostada, exhausta pero radiante. Su chasis claro brillaba suavemente bajo la luz, y sus ópticos, aunque apagados por el cansancio, se encendían de pura emoción. Su sistema interno había soportado ciclos interminables de ajustes, dolores, dudas... pero ahora, ahora todo cobraba sentido.
-Ratchet -susurró Tn con una sonrisa apenas visible-, ¿quieres verlo tú primero?
El viejo médico, aquel bot sabio y a veces huraño, parpadeó, conmovido. Por primera vez en incontables eones, no era un doctor atendiendo a un paciente. Era un padre. Con movimientos reverentes, se acercó a la cápsula de gestación.
Allí, protegido aún por campos de energía cálida, se encontraba un pequeño protoform. Su estructura aún era blanda, translúcida como el cristal, pero ya se distinguían las ligeras líneas de armaduras futuras. Su chispa -una chispa nueva, fresca, pura- vibraba en el aire como una canción.
Ratchet se agachó, sin atreverse casi a tocarlo.
-Es... perfecto -murmuró, su voz ronca por la emoción contenida.
Tn extendió una mano hacia él, buscando su toque. Sus dedos se entrelazaron, ambos temblando. Por fin, lo habían logrado. Después de tanta destrucción, tanto dolor... habían creado vida.
-¿Cómo lo llamaremos? -preguntó ella, su voz apenas un soplo.
Ratchet la miró, sonriendo como pocas veces lo había hecho en su vida.
-Tú deberías elegirlo -respondió-. Eres la más valiente de nosotros dos.
Tn dejó caer su cabeza sobre el soporte, cerrando los ópticos un momento mientras pensaba. Recordó las épocas oscuras, la soledad, las veces que soñó con un hogar imposible.
-¿Y si lo llamamos Auren? -dijo de pronto-. Significa "primer latido" en el dialecto antiguo.
Ratchet repitió el nombre en voz baja, saboreándolo. Primer latido. Era perfecto. Porque eso era exactamente lo que sentía en su spark ahora mismo: un primer latido de esperanza.