Masumi perdió a sus padres a la temprana edad de dos años, un vacío que dejó una herida profunda en su corazón. La ausencia de sus padres era un dolor constante, pero en medio de esa oscuridad, siempre tuvo a una figura protectora que la cuidó como...
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El tiempo, como un río que fluye sin cesar, se deslizaba a través de los días. Dos meses habían pasado desde el encuentro de Itachi y Masumi en el bosque de cerezos, dos meses llenos de secretos, y de emociones.
La albina continuaba con sus misiones en el ANBU. Su vida era una mezcla de sombras y silencios, de peligros ocultos y secretos que guardaba celosamente. La búsqueda sobre los secretos oscuros de Danzo se había convertido en una obsesión, un objetivo que la impulsaba a avanzar, a descubrir la verdad, a luchar por la justicia.
Encontrar información sobre Danzo, un hombre envuelto en un manto de misterio y rodeado de una red de poder, era una tarea casi imposible. Sus movimientos eran ocultos, sus acciones eran impredecibles, y sus enemigos, los pocos que se atrevían a desafiarlo, desaparecían sin dejar rastro.
Pero Masumi no se rendía. Su perseverancia era inquebrantable, su sed de justicia, insaciable. Y poco a poco, como un detective que rastrea las huellas de un criminal, comenzó a encontrar pistas, pequeñas señales que la conducían por el camino correcto.
Dos pistas, minúsculas pero significativas, habían aparecido en su camino.
La primera pista era un posible ola de abuso en el ANBU de Raíz, no solo a las niñas y mujeres de esa organización, también hay datos de posibles niños y jóvenes, todos ellos siendo dañados por el que es su líder. Masumi sabía que Danzo controlaba Raíz con puño de hierro, que su poder se extendía como una telaraña por la aldea, y que sus métodos eran despiadados. Esta pista le hacía pensar que Danzo no solo estaba extendiendo sus tentáculos, buscando controlar más áreas de Konoha. Él era un ser repugnante y ella estaba ansiosa por acabar con él.
Quiere verlo de rodillas y sufriendo. Colapsando por el poder que ella le quitaría.
La segunda pista era una vinculación con Orochimaru. Ella sabe que Orochimaru, el sanin renegado, es un peligro para Konoha. Sus experimentos con personas y con jutsus prohibidos, su obsesión por la inmortalidad, lo convertían en un enemigo implacable.
La Senju oculta tenía que investigar a fondo a Orochimaru, descubrir su paradero, localizar uno de sus laboratorios. Necesitaba confirmar la información, asegurarse de que la conexión entre Danzo y Orochimaru era real. ___________________________
La mañana se abría sobre Konoha, el sol naciente bañaba la aldea con una luz dorada. Masumi, con su uniforme de ANBU, se dirigió a la torre Hokage, su mente llena de pensamientos. La búsqueda de Danzo seguía en su mente, pero sabía que tenía que dejar de lado sus preocupaciones, al menos por un momento.
Al llegar a la oficina de la Hokage, se arrodilló, como es la costumbre ANBU. Y fue recibida por Tsunade, su mirada seria y penetrante.
-Ryū -dijo Tsunade, su voz firme y decidida-. Tengo una misión para ti.
Masumi asintió.
-Hay una red criminal que ha entrado en la frontera del Fuego -explicó la Hokage-. Se hacen llamar Ryde's Ter, y su trabajo ilegal es la trata de personas. Operan desde un burdel, del mismo nombre que el de su organización.