Sour Love ꒰͡ ི ༏ ྀ͡꒱ Thanos & Nam-gyu X READER

20. piercing ♱ N°124

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«¿Que tal?» Nam-gyu se despierta completamente con ese mensaje tuyo y mira su teléfono confundido

La foto que recibió de tu lengua de alguna u otra forma lo encendió, sacándolo de su tonto trance.

«¿Cuándo decidiste hacerte un piercing en la lengua?» -preguntó, sin querer elogiarte ni admitir que realmente le gustaba, pero te todas formas lo sabías.

«Fue algo repentino, pero imagina lo excitante que será besarte con eso»

Incluso de que antes lo mencionaras, Nam-gyu lo habría imaginado y eso le hizo maldecir en voz baja. Tan arrogante.

Se sentó en el esponjoso sofá, con ambos brazos cruzados detrás suyo. Se imaginó besándose, tu lamiéndole los labios para abrirlos y Nam-gyu no dudaría en obedecer. Mediante sus pensamientos se turnaban cada vez más eróticos, su gran sonrisa crecia. Se preguntó distraídamente si sentiría el metal de inmediato o si solamente lo pasará desapercibido, como si nunca lo hubieras tenido.

Su pensamiento se fue a la basura por completo, imaginandote con ese piercing, lamiendo a lo largo de su longitud dura y siendo capaz de sentir la pequeña bola de metal sobre su polla, incluso imaginando la pequeña bolita jugar con su glande. El solo pensamiento le provocó un escalofrío reconfortante en la columna, tanto como excitante.

Sin embargo, antes que su tonta mente pudiera volver a imaginar algo pornográfico, el zumbido de su teléfono lo saco de su mundo, llevando por inercia la mano para observar el motivo.

«¿Sigues ahí, amor? D: »
«Voy a tu casa en 20 minutos»

Lo probaría si o si.

Pero tal vez nunca pensó que realmente se sentía genial. Es como si una textura extra juguetona rozará su gruesa polla. Nam-gyu hechaba su cabeza hacia atrás mientras sostenía tu pelo en una coleta improsivada, disfrutando de la novedad tuya. Mordió su labio inferior y jadeó tu nombre, antes de empujar con fuerza tu cabeza.

«Mhh..Joder... Al menos te hiciste algo bueno..»

Tus arqueadas penetraron sus oídos, como dulces melodias que el amaba escuchar. Te sonrío tan arrogante, que tan solo sin mirarlo podrías sentirlo. Disfrutaba ver como te ahogabas en su dulce polla, mientras tus lágrimas caían,y después de todo, seguías viéndote tan delicada.

Más ese piercing, joder lo estabas llevando a las estrellas. No es como que amara los juguetes sexuales en el, pero tú boca se sentía como uno, tan reconfortante y cálido.

Empezaste a succionar con ternura su gruesa cabeza, jugando con tus dedos por su largo tronco venudo. No era la mejor forma de estrenar tu piercing.

Cuando Nam-gyu soltó tu cabeza para tapar su boca por su gran gemido, no perdiste el tiempo el salir a tomar aire. Joder te morias.

«¿Quien te dijo que dejes de chupar?» Volvió a introducirte entre su polla.

Tu tímidamente te sostuviste de sus muslos, buscando un apoyo para evitar tambalear.

Envolviste su polla con tu boca, obligándolo a llevar la cabeza hacia atrás totalmente excitado mientras empiezas a mover la cabeza. No es como si tu no le hubieras chupado la polla antes, pero ese piercing parecía convencerle psicológicamente que los créditos eran gracias a él. De todas formas, solo le calentabas tu. La forma en la que tú boca se veía llena, y las ahorcadas urgentes de necesidad lo metía en una neblina de solo sexo.

Tu gimes aún con su polla en tu boca, emitiendo una vibración que parece hacerle palpitar la polla. El voltea a verte con dificultad, casi entrecerrando los ojos del placer.

"Dios mío, llora más.» Te empuja una ves más, apuntando su gorda polla en tu garganta, por lo que acompañado de una ahorcada, sueltas nuevamente un gemido. «Mghh...Carajo...no cierres esa puta boca.»

Y así volvió a llevar su cabeza hacia atrás, ahogándote en su polla, ignorando tus arqueadas necesitadas. Empiezas a babear alrededor de su miembro, atragantandote porque pues la punta de tu nariz choca con su pelvis. Empiezas a trazar con dificultad tu lengua vena por vena, dibujando le una sonrisa engreída a Nam-gyu.

«Mhg...Chupa más fuerte..» Con el pecho agitado, se sostuvo con una mano de la pared, mientras la otra te controlaba totalmente. Se sentía tan virgen por exitarse de esa forma tan solo con tu boca.

Inconsciente, empezó a follar tu boca con suaves embestidas, aumentando tus pobres lágrimas. Tu lloriqueabas en su boca, sin saber que eso aumentaría su placer y rapidez. Nam-gyu empezó a gemir, tensando sus músculos por la satisfecha estimulación, y cuando sintió que pronto llegaría, de mala gana te separó de su polla, con un dulce sonido obsceno.

El aún seguía tenso, casi temblando, casi incoherente a la realidad. «Ah..Mgh.. Masturbalo.» Mascullo entre gemidos, ordenandote a su placer.

Tu no perdiste tiempo, llevando tus sudorosas manos alrededor de su polla, la cual parecía contraerse por tu duro agarre. Obviamente aprovechaste el momento para descansar como se debía, tosiendo sutilmente frente a su polla. Llevaste de arriba a abajo tus movimientos, mientras Nam-gyu parecía ver las mismas estrellas. Mordió sus labios con fuerzas cuando unos pocos golpes de tu puño lo llevaría a su orgasmo.

«M-mierda sigue..Joder..Mhh» Antes de que pudieras escupir unas palabras agitadas, su gemido ronco termino de mojarte por completo, entrecerrando los ojos al sentir su polla estallar en tu cara, con ligeras convulsiones sobre tu suave mano. El semen caía desde tu mejilla con pequeñas hileras seguidas, humedeciendo pegajosamente tu cara de alguna u otra forma. Soltaste una ligera risilla, antes de pasar un camino de tu lengua por su tensa polla, aún jadeando con tus manchas.

«A-ah..De ninguna manera..Esa mierda se siente tan genial...» Acezo exasperando, cerrando sus ojos en calma mientras exhalaba y inhalaba con total profundidad.