Skyfall Catnipz

09

Había hecho esto con mi mamá anteriormente, sabía que debías dejar que alguien con quien tenías un vínculo fuerte te oliera y se envolviera en tu aroma en momentos donde la pasaban mal sentimental o mentalmente, eso ayudaba a la otra persona a tranquilizarse y a sentirse en calma. Aunque nunca antes había hecho esto con nadie más, ni siquiera un alfa.

Las feromonas de estrés de Minji desaparecieron y pude sentir como su espalda se relajaba bajo mis manos.

Me sorprende que funcione – aparte algunos mechones de cabello de su oreja.

Ella profundizo más el abrazo y se aseguró de que cada parte de mi cuerpo quedara cubierto con su olor, eso solo podía significar una cosa.

Eres importante para mí – su voz tranquila y profunda me estremeció – no te imaginas cuánto. Siempre rechace la idea, pero ahora tengo la necesidad de pertenecer a algo, de pertenecerte a ti.

Sentí un pequeño beso en mi cuello y me aferre más a ella, sentía que mi corazón estallaría en cualquier momento y debía aferrarme a algo para no caer, quería aferrarme a Minji por la eternidad.

Bese suavemente su oreja y acaricie su nuca con mis dedos. Se separó un poco sin soltar el abrazo y me miro a los ojos. Creo que por primera vez vi el brillo en sus orbes oscuros que solían parecer sin vida, tenía una mirada cálida y con algo que no podía comprender.

Eres importante Minji – puse mis manos sobre su pecho, acariciando los botones de su camisa – no sé cuándo sucedió, pero ahora no puedo estar separada de ti por tanto tiempo o mi instinto me obligara a buscarte.

Me tomo del rostro y lo acaricio con suavidad, rozo su nariz con la mía y beso mis mejillas, mi nariz y la comisura de mis labios. Bese su barbilla cuando sentí sus labios sobre mi frente, acaricie la extensión de su cuello y bese su bonita nariz, la escuche reírse y mi corazón se llenó de felicidad.

Nos miramos cómodamente durante un tiempo, hasta que la campana que anunciaba el fin del almuerzo interrumpió nuestro momento. Nos separamos lentamente y comenzamos a recoger los libros de la mesa.

Sentí que Minji me abrazaba por detrás y volvía a hundir su rostro en mi cuello.

Deberías volver a clase – apretó un poco su agarre en mi cintura.

Me gire para verla.

No te presiones demasiado – pase mis manos por sus brazos y hombros hasta llegar a su nuca y la acerque a mi – Hanni me lo dirá después de todo – roce nuestras narices y Minji sonrió suavemente.

Es una soplona – beso mi frente y mejillas – te veo al final de la práctica.

Me separe con tristeza de ella y me dio un apretón de manos antes de separos por completo. Mientras caminaba por el pasillo para volver a clases, me di cuenta que estaba cubierta por el aroma de Minji y que probablemente olería a ella por el resto del día. No odiaba la idea en absoluto, aquello solo me hacía feliz. Y entonces me pregunte.

¿Me había enamorado de Kim Minji?

Si, lo había hecho y eso solo hizo que mi corazón se sintiera pesado. ¿Esto estaba mal?, negué, ¿Cómo algo que se sentía tan bien y me hacía feliz, estaría mal?

Hanni me abrazo de sorpresa y me jalo del brazo para llevarme hasta el cubículo de uno de los baños.

Apestas a Minji – bajo la tapa de la taza y me sentó en ella, luego la vi quitarse el saco y desabotonar su camisa dejando expuesto su bonito torso definido y con un sostén blanco cubriendo sus pechos – necesitas quitarte algo de su olor de encima o estarás en problemas con los maestros – hizo lo mismo conmigo.