"Everything has changed II" Todo Ha Cambiado II (Klaroline)

Capítulo 3

Las lágrimas rodaban por mis mejillas debido a las palabras que Klaus acababa de decir, eran simplemente hermosas y sin palabras, y la proposición me dejo emocionada, después de que terminara de hablar, lo mire por un segundo, y mire el hermoso anillo que estaba ahí, no me tenía que pensar la respuesta

-Sí, Klaus. Quiero ser tu esposa –dije emocionada, Klaus me puso el anillo en el dedo, se paró y nos dimos un beso, un largo beso, al separarnos escuchamos los aplausos de nuestros amigos y familiares.

La primera en levantarse fue Hope, viniéndonos a dar un abrazo

-No sabes lo feliz que me hacen –dijo ella dándonos un fuerte abrazo, cuando se separó de nosotros pudimos ver a todos sentados en la mesa con una gran sonrisa

-Quiero darles mis felicitaciones. Caroline tu sacas el lado bueno en Nicklaus, espero que sean felices –nos dijo Elijah

-Gracias hermano –dijo Klaus

-Bueno Barbie, te va a tocar aguantar a Klaus, en una manera más seria. Felicitaciones. Lo has atrapado –dijo Damon

-Cállate Damon. Estamos felices por ti Care –Dijo Elena

-Gracias –dije con una sonrisa que no me podía sacar del rostro

-Caroline, Klaus, Les deseo lo mejor – Nos dijo Stefan

-Gracias Stef –dijo Klaus

-Bueno quiero hacer un brindis, por mi hermano Nick y Caroline ustedes son perfectos juntos, me encanta verlos juntos. Y Caroline tú ya eres una Mikaelson, desde hace mucho tiempo, tú ya eres parte de nuestra familia. Salud –Todos chocamos las copas después de las palabras de Rebekah. Pues pronto oficialmente sería la esposa de Klaus, alias el amor de mi vida

Cuando la cena termino, todos nos quedamos en la sala bebiendo, observe que Hope se levantó y fue directo al estante donde estaba el bourbon y se sirvió un vaso

-¿Qué crees que haces, señorita? –le pregunte yo, atrayendo la atención de todos hacia Hope

-Solo me sirvo un vaso

-Quién te dijo que tenías la edad adecuada para tomar? –me apoyo Elijah

-Tengo casi 18! –protesto Hope

-Klaus? No vas a apoyarme con esto? –dirigí mi atención hacia mi futuro esposo

-Prefiero no meterme amor, después quedo como el malo

-Caroline, déjala, tú también tomabas a su edad –Me dijo Stefan

- Gracias Stef –dijo Hope, alzando su vaso y tomando su trago

-Oficialmente me rindo –dije yo

-Bueno... Creo que es hora de que nos retiremos –dijo Damon – Ya no tenemos la capacidad de soportar como cuando éramos vampiros –Dijo Damon

-Se nos había olvidado de que ahora ustedes dos son unos débiles humanos –dijo Rebekah señalando a Damon y Elena

-Sí pero estoy seguro que aún se cómo encontrar una daga y clavártela –dijo Damon. Rebekah soltó una risa

-Son tan tiernos, las dagas ya las quemamos querido –dijo Rebekah

-Dejaste que quemaran las dagas? –preguntó Elena a Klaus sorprendida, pues yo no le había contado ese detalle

-Caroline les ayudo y se las dio a Rebekah y ella las quemó –Dijo resentido

-Supéralo –le dije y le di un beso, con lo que logre que sonriera

-Iugh! No puedo seguir viendo esto –Dijo Damon y se marchaba por la puerta

-Stefan, no es que te hecho de mi casa, pero ¿qué sigues haciendo aquí? –preguntó Klaus

-Klaus! –dije

-Lo siento amor, pero me gusta ser directo –yo negué con la cabeza

-Respondiendo a tu pregunta Klaus –dijo Rebekah – Necesito hacerles unas preguntas a Stefan

-Está bien, Nosotros nos retiramos. Stefan siéntete como en tu casa –Dijo Elijah, marchándose con Gia

-Nosotros también nos vamos –dijo Klaus y nos marchamos, Hope, nos siguió y ella se fue a su habitación y nosotros a la nuestra

-No notas a Stefan un poco raro con Hope? –me dijo Klaus mientras estaba cambiándome de ropa

-Raro cómo? –pregunte

-Solo raro –dijo él. Yo sonreí, pues me encantaba verlo en el papel de padre

-Esa es una de las cosas que me encanta de ti –le dije pasando una mano por su suave cabello, el me dedico una de esas sonrisas que él sabía que me volvían loca

-Klaus ¿realmente quieres que sea tu esposa? Con lo neurótica, fanática del control y todo eso –pregunté a el

-Eso es lo que más me encanta de ti, tus defectos, quiero que seas mi esposa, porque quiero estar contigo en esta larga eternidad. Porque desde que te conocí, cuando veo mi futuro, tú siempre estás en el –Le sonreí y le di un largo beso

-Caroline... estoy seguro que me quiero casar contigo, es lo más claro que tengo, pero quiero que tú tengas claro que yo sigo siendo igual, yo no he cambiado, es solo que no quiero decepcionarte y tengo miedo porque sé que lo haré –dijo él y bajo la cabeza

-Klaus, se perfectamente cómo eres, sabía todo eso cuando decidí venir a New Orleans, cuando decidí quedarme aquí. Contigo. Lo tenía todo claro, y puede que no esté de acuerdo con ciertos métodos tuyos, pero sé que lo intentas, intentas cambiar, pero tienes demonios que te atormentan y son más fuertes que tú mismo, por eso para mí me basta con que lo intentes, porque te amo Klaus –Klaus se quedó observándome por un momento

-Definitivamente, no puede haber persona más pura y llena de luz en este mundo que tú Caroline, Te amo –Dijo mirándome a los ojos, haciéndome que me pierda en su mirada

Narrador externo

Lauren iba llegando a a casa que se estaba quedando en el otro lado del río, al abrir la puerta se encontró a Andrew bebiendo de la sangre de una humana, Andrew ni siquiera se había dado cuenta de la presencia de Lauren, así que ella decidió hacer que su sangre hierva para que se deje de alimentar de esa pobre humana, Lauren hizo el hechizo y enseguida Andrew soltó a la chica

-En qué quedamos Andrew? Dijimos que ibas a beber de bolsas, los Mikaelson no pueden sospechar de nosotros –Lauren le dijo al chico que había tirado el cuerpo de la humana sin vida a un lado

-Estaba hambriento, la chica se me cruzo en la calle, Lugar equivocado y el momento equivocado- Dijo Andrew

-Cambiando de tema. Cómo vas con lo de acercarte a Hope Mikaelson? –preguntó ella

-Decidí hacerlo en una fiesta el viernes que es para ella, por su cumpleaños, me acercare y la invitare a bailar, seré el típico caballero y la chica quedara encantada conmigo. Lo sé –dijo el en un tono prepotente

-Si te acercas a ella, te podrás infiltrar en los Mikaelson y al fin podrán pagar por todo lo que nos hicieron

-No sabes cuánto espere para vengar la muerte de mi madre, quiero que cada uno de ellos sufra –dijo Andrew

-Eres todo lo contrario a tu madre, por lo que oí, Tatia Petrova era una chica dulce, tu eres fuerte

-Lo soy, y por eso con tu ayuda vamos a hacer que corra sangre por estas calles. Le vamos a arrebatar todo lo que aman –Dijo Andrew, el hijo de Tatia