die for you, han seojun ★

𝐱𝐢𝐢𝐢. fuck you

｡ﾟﾟ･｡･ﾟﾟ｡
'cause fuck it, i was in love
so fuck you if i can't have us
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— Ay...— murmuró Hana.— ¿cómo le hizo para que yo las tuviera?— se preguntó a sí misma cuando volvió a encontrar las llaves de la motocicleta de Seojun en su bolsillo.

Entró al laboratorio y se dirigió a su asiento junto a Suho, pero se dio cuenta de que Jugyeong estaba sentada ahí. Cosa que hacía todo aún más sospechoso.

— Lo siento, Hannie... me muevo.

— No, quédate ahí.— dijo Hana con una sonrisa amable y luego le guiñó a su hermano, como si fuera cómplice de algo.

Hana se terminó sentando con Sooah y otros compañeros, con ella no sucedió nada importante, pero Jugyeong comenzó a mirar de más a Suho ese día. Lo miró de perfil, lo miró estudiando, notó algunos detalles que no había notado antes... y se dio cuenta de que le gustaba Lee Suho.

Todo el día estuvo pensando en ello y estuvo consternada. Se le quedaba mirando a Hana preguntándose si debería decirle a su amiga que le gustaba su hermano.

Hana sintió su mirada en la hora del almuerzo, le sonrió mientras tomaba asiento frente a Jugyeong.

— ¿Qué pasa, Limgyu?— Jugyeong se exaltó y luego sonrió mientras negaba con la cabeza.

— ¡N-No, nada!

— ¡Yo me siento junto a Hannie...!— dijo Sooah animadamente, dispuesta a tomar asiento al lado de Hana, cuando Seojun llegó y la hizo a un lado empujándola con ligereza. Sooah lo miró ofendida y Taehoon se puso a la defensiva de su novia.

— Lo siento.— murmuró Seojun con indiferencia y luego miró a Hana con una sonrisa coqueta. Hana sintió que podría caer sobre sus rodillas por lo mismo, pero sabiendo que ahora toda la gente en el comedor los observaba, se contuvo y mostró más seriedad.

— ¿Qué haces?— preguntó Hana.

— ¿Qué parece que hago? Quiero comer contigo.— toda la gente en la cafetería se sorprendió y los murmurllos comenzaron. No era que Hana fuera muy sensible... pero sintió ganas de llorar en cuanto oyó susurros.

— ¿Me quieres volver loca?

— Solo quiero cuidar de ti,— dijo Seojun acariciando el cabello de la peli negra con cariño.— no has estado comiendo bien últimamente, alguien debe asegurarse de que comas.

Después de eso Seojun dio dos palmadas bajo la mirada de todos y dos de sus amigos le arrimaron una charola llena de tonkatsu, el favorito de Hana, luego él dio una palmada más y Chorong le arrimó a Hana un jugo de uva. Como si de un restaurante se tratara y ella fuera una comensal excepcional.

Hana lo miraba atónita. Después de todo lo que le había dicho y las razones que le había explicado... ¿se atrevía a seguir haciéndole eso?

Seojun usó los palillos y tomó un pedazo de tonkatsu, luego comenzó a arrimarlo al rostro de Hana, como si quisiera darle de comer en la boca como una tierna pareja. Hana solo se levantó con decepción y salió del comedor.

— ¿Acaso cree que esto es romántico?— preguntó con molestia para sí misma mientras caminaba con raspones havua el baño para ocultarse.