un reloj extraño de heroinas

capitulo 1 campamento

Ben: (sorprendido) y (mintiendo)Oh, sí. Es un reloj de supervivencia que me regaló mi abuelo. Tiene funciones útiles como brújula, termómetro y linterna.

Lincoln: (impressionado) ¡Guau, eso suena genial! Nunca había visto un reloj así antes.

Ben: (sonriendo) Sí, es bastante útil cuando estás al aire libre. ¿Tú tienes algún equipo especial para acampar?

Lincoln: No realmente, solo mi mochila y lo básico. Pero tu reloj suena increíble.

Mientras tanto, Lincoln comenzaba a sentir una extraña sensación, como si algo estuviera fuera de lugar en el campamento.

Lincoln: ¿Sabes? Una vez, durante un campamento escolar, nos encontramos con un mapache travieso que intentaba robar nuestras provisiones de comida. Fue una situación divertida pero un poco caótica.

Ben: ¡Ja, suena como una experiencia divertida! En mi último campamento, nos encontramos con una familia de ciervos mientras estábamos haciendo una caminata. Fue increíble verlos en su entorno natural.

Lincoln: Eso suena asombroso. Los encuentros con la vida silvestre siempre son emocionantes. ¿Alguna otra anécdota interesante de tus aventuras al aire libre?

Ben: Una vez, durante una excursión de escalada, nos sorprendió una tormenta de lluvia. Tuvimos que improvisar un refugio y pasar la noche bajo la lluvia. Fue una experiencia desafiante pero nos unió mucho como equipo.

Lincoln: ¡Vaya, eso suena intenso! La naturaleza puede ser impredecible, ¿verdad? Aunque a veces nos pone a prueba, esas son las experiencias que más recordamos.

Ben: Totalmente de acuerdo. Esas son las historias que hacen que cada campamento sea único e inolvidable.

El tiempo pasó lentamente mientras las actividades del campamento continuaban, y finalmente llegó la noche. Mientras los otros campistas se preparaban para acostarse y disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza, Lincoln se sentía inquieto. A medida que la oscuridad envolvía el campamento, una sensación de nerviosismo crecía en él, como si algo estuviera fuera de lugar pero no pudiera identificar qué era.

Lincoln trató de sacudirse la sensación incómoda mientras se acurrucaba en su saco de dormir, pero sus pensamientos seguían dando vueltas en su mente. Miró hacia el cielo oscuro, tratando de encontrar consuelo en las estrellas brillantes, pero incluso su resplandor no pudo calmar su inquietud.

Susurros lejanos y los sonidos de la naturaleza nocturna llenaban el aire, pero para Lincoln, todo parecía demasiado silencioso, como si estuviera esperando algo que aún no había llegado.

Decidió que necesitaba un momento de tranquilidad para despejar su mente, así que se levantó con cuidado para no despertar a sus compañeros de campamento y se dirigió hacia el lago que había visto durante el día. Caminó en silencio, dejando atrás el campamento y adentrándose en la oscuridad de la noche.

A medida que se acercaba al lago, el sonido suave del agua resonaba en la tranquilidad de la noche. La luz de la luna brillaba sobre la superficie del lago, creando un espectáculo de reflejos plateados que parecían bailar con cada pequeña onda.

Lincoln se sentó en la orilla del lago, dejando que la paz y la serenidad del lugar envolvieran su mente inquieta. Observó cómo las estrellas se reflejaban en el agua, sintiendo una calma renovada mientras contemplaba la belleza natural que lo rodeaba.

Por un momento, todo pareció estar en armonía, y Lincoln encontró la claridad que estaba buscando. Respiró profundamente el aire fresco de la noche, sintiéndose más tranquilo y centrado que antes.

Con cautela, Lincoln se acercó al borde del lago para investigar lo que había caído. Al acercarse, vio cómo la cápsula se abría por sí sola, revelando un extraño reloj en su interior, idéntico al que Ben llevaba consigo. Sus sentidos se agudizaron mientras observaba con atención el inquietante objeto.