Paranoia [Y.M]

8

Yoongi miraba algunas bebidas para poder llevar hasta que vio un cartel de desaparecido y la foto de un chico, el alfa vio la foto y sentía como si ya lo hubiera visto antes.

—¿Qué haces? —le pregunto el omega.

—Este chico llevaba un año desaparecido. —dijo Yoongi. —pero siento que ya lo había visto en algún lado.

—Tal vez sea porque lo vimos en las noticias. —mencionó Jimin. —recuerda que el devorador de omegas no solamente asesinaba a omegas, sino de vez en cuando alfas.

—Tienes razón. —dijo Yoongi. —¿Ya tienes lo que vas a llevar? —le preguntó.

—Si alfa. —lo tomo de la mano. —Hay que pagar e irnos.

Yoongi asintió y luego de pagar condujeron de regreso a la casa donde vieron que estos hacían una parrillada mientras reían. Jimin bajó primero y buscó con la mirada a su prima, pero no la encontró por ningún lado.

—¿Dónde está Youha? —preguntó.

—Salió un momento. —dijo su tía. —no tardará en venir.

—Está bien. —miro a Yoongi. —Mi alfa está algo cansado y algo enfermo, por lo cual irá a dormir y yo le haré compañía.

—Está bien cielo. —habló su madre. —que te recuperes pronto Yoongi.

Yoongi agradeció e hizo una corta reverencia para entrar a la casa con Yoongi e ir a la habitación. Jimin solo miraba como Yoongi dormía en la cama tranquilo, pero Jimin estaba atento, pues, el alfa tenía algo de fiebre.

Al anochecer una chica iba caminando de manera lenta por todo el establo viendo que todo estuviera en su lugar hasta que escucho un ruido y al girarse vio un lobo café gruñirle. Ella se quedó quieta, pues el lobo era grande, ella retrocedió a paso lento, pero rompió una rama y el lobo se tiró sobre ella, comiéndosela viva mientras ella gritaba.

***

Yoongi abrió los ojos y vio al omega dormido a su lado, este descansaba tranquilo en su pecho. El alfa se movió despertando al omega, el cual le tocó la frente y sonrió al ver que la fiebre ya había bajado un poco.

—Ya casi no tienes fiebre. —dijo Jimin. —Quédate aquí iré por el desayuno.

Cuando Yoongi iba a hablar la puerta de la habitación fue tocada con insistencia, por lo cual el omega se levantó y abrió la puerta para ver qué sucedía, al hacerlo uno de sus primos le dio algo en el oído y Jimin asintió para cerrar la puerta y sonreír de lado.