[ kookgi ]; destiny

II. bloomin'!

Yoongi miró fijamente a Jungkook, su cola moviéndose nerviosamente contra su estómago solo aumentando las mariposas que revoloteaban allí dentro, con un leve sonrojo se sacudió al ver la sonrisa deslizándose en el rostro del alfa. Ofreciendo su propia sonrisa tímida, buscó un lápiz y le entregó a Jungkook un 2b con la esperanza de que sus mejillas no parecieran tan cálidas como se sentía.

Observó, embelesado, mientras Jungkook tomaba el lápiz mostrando la misma sonrisa lobuna, los colmillos brillando, sus orejas moviéndose en señal de curiosidad, girando un poco en la silla, la mirada de Yoongi bajó deslizándose sobre él, su omega gimió de alegría por la proximidad, aclarándose la garganta, volvió a mirar su lienzo, mordiéndose el labio con sus colmillos de gatito jugando con la carne.

—¿No hablas mucho, verdad?.—el gatito levantó la vista cuando el tono de Jungkook continuó, sorprendido por el hecho de que Jeon Jungkook todavía estuviera hablando con él.

Aclarándose la garganta un poco, su cola rubia deslizándose lejos de su cintura para balancearse insegura detrás de él.

—No. Quiero decir, no, no muchos se interesan en hablar conmigo.—se sonrojó aún más cuando esos ojos oscuros del bosque lo estudiaron antes de que una cálida risa abandonara al lobo.

—No digas esas cosas, Yoonnie.

—¿Yoonnie?.

Parpadeó hacia el otro hombre, inclinando la cabeza con el ceño ligeramente fruncido. Se había olvidado de darle su nombre al lobo y aún así Jungkook había usado una abreviatura con tal certeza que uno podría pensar que eran cercanos.

Casi sonrió, sintiendo sus labios tirar de diversión cuando Jungkook se sonrojó un poco, frotando la parte posterior de su cuello con una mano, los ojos verdes apartaron vacilantes la mirada de los cafés gatunos.

—Uh, escuché a alguien decir tu nombre temprano, así que lo acorté un poco, suelo darle apodos a todos. Ya sabes, si eso está bien.

El gatito pisoteó con bastante firmeza la brillante sensación de deleite que le produjo el hecho de que Jungkook supiera su nombre, y respiró hondo pero lentamente para calmar su corazón que latía acelerado. Seguro que el encantado balanceo de su cola probablemente lo estaba delatando si su amplia sonrisa de gomita también lo había hecho.

—Me gusta bastante, sólo mi familia me llama así pero tú también eres bienvenido.

La sonrisa de Jungkook iluminó sus entrañas causando que se moviera un poco con un sonido de felicidad mientras el alfa dejaba caer su mano riéndose alegremente.

—Genial.

Ambos se encontraron asintiendo con la mirada fija en los ojos del otro.

Fue un claro carraspeo lo que hizo que se sobresaltaran y apartaran los ojos del otro, ambos jóvenes se sonrojaron levemente pero Jungkook seguía sonriendo y moviendo su cola alegremente.

De repente, Yoongi fue consciente de que todos los estaban observando.

La maestra Joy aplaudió y ordenó atención sonriendo a la clase.

—Tomen sus lápices y comencemos, hoy vamos a dibujar paisajes.

Yoongi se encontró incapaz de prestarle atención a la maestra, en lugar de eso, miró furtivamente de reojo al magnífico hombre a su lado. Los ojos verdes se encontraron con los cafés y ambos se sonreían mutuamente, entablando entre susurros una conversación tranquila sobre las acuarelas.

Cuando Yoongi regresó a casa más tarde esa noche, ni siquiera se dejó molestarse por las bromas de sus hermanos, sino que se encerró en su habitación con una lenta sonrisa en los labios.

Jungkook sabía su nombre.

También había aprendido sobre el alfa, sabía su color favorito (púrpura), tenía una obsesión con la leche de plátano y era poderosamente protector cuando se trataba de su hermano Jimin, aunque también era un alfa. Además de Arte, también estaba tomando Inglés e Historia. La única lección que no compartieron fue el primer período en el que Yoongi tenía clases de Piano y Jungkook estaba en Ciencias del Deporte.

Todavía se preguntaba si todo fue un producto de su imaginación causada por la obsesión que tenía por ese lobo. Lo que había pasado ese día era tan irreal. Siempre sintió al alfa tan inalcanzable, fue un verdadero shock que Jungkook diera el primer paso.

Aunque sólo fue una simple conversación, Yoongi se sentía cómo si estuviera volando entre las nubes, con los mismos rayos del sol calentando su pecho.

Cayó lentamente en el sueño aún con la cosquillosa y cálida sensación de las mariposas revoloteando en su estómago.

Aunque, otra vez se olvidó de cenar.

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Amo tanto a Tommy February6 😭❤️

Habrán temitas complicados, no tan explícitos pero podrían ser desencadenantes para ciertas personas así q pongo advertencia 😔✋