Capítulo 13: Protección.

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Satoru llevaba en brazos al pequeño Megumi que se había quedado dormido después de tanto llorar. Venían de regreso del funeral de su madre; era triste pero al mismo tiempo Gojo estaba agradecido de que hubiera sido su misma madre la que le explicara todo a Megumi antes de fallecer, ya no hubo nada qué hacer por ella pero al menos tuvo el suficiente tiempo para despedirse de su hijo y preparar todo para que Gojo lo adoptara, de esa forma pudo irse tranquila de este mundo.

Geto los acompañó en todo momento. Él no era allegado a la familia Fushiguro, pero sabía que Satoru lo necesitaba a su lado más que nunca.

Llegaron al auto de Satoru, aquel que sus padres le habían regalado al igual que su casa; Gojo tenía muchas facilidades en ese sentido y precisamente por eso a tan corta edad ya vivía solo y pudo hacer el compromiso de cuidar y proveer a ese niño que ahora era su responsabilidad.

Abrió una de las puertas traseras y acostó a Megumi en el asiento de atrás; no quería despertarlo, el niño necesitaba dormir después de vivir ese momento tan fuerte, demasiado fuerte para su corta vida.

—Si quieres yo manejo, tú también necesitas descansar —se ofreció Suguru al ver a su pareja con esa expresión de agotamiento.

Satoru asintió, le dio las llaves y se subió al asiento del copiloto. Cerró los ojos y casi al instante se quedó dormido.

En el camino empezó a llover. Mientras manejaba Geto pensaba en qué iba a pasar ahora con ese niño. Llevaba ya dos años de relación con Satoru, lo amaba y estaba seguro de que quería pasar el resto de su vida con él… pero Satoru ni siquiera le había consultado acerca de su decisión de adoptar a Megumi, hizo todos los preparativos sin siquiera preguntar su opinión y en ningún momento buscó involucrarlo en el asunto… aunque Suguru tampoco se quería involucrar demasiado, a pesar de su edad ya tenía muy bien establecido su proyecto de vida, estaba seguro de que no quería tener hijos ni ahora ni en el futuro y le conflictuaba bastante esto que estaba pasando porque quería que Satoru fuera parte de su futuro, siempre lo contempló a él en su proyecto de vida, incluso estaba pensando en pedirle que vivieran juntos cuando terminaran la universidad, pero ahora…

—¿Ya llegamos?

Satoru se despertó y se dio cuenta que el auto estaba detenido, pero no podía ver bien hacia afuera porque llovía bastante.

—Sí, pero no quería despertarte hasta que dejara de llover, necesitas descansar y está lloviendo muy fuerte como para bajar a Megumi así.

Gojo volteó hacia la ventana, apenas podía divisar el frente de su casa y tuvo una sensación extraña al escuchar que Geto mencionaba al niño… Ahora era su niño, se iban a bajar del auto, iban a entrar a su casa y se iba a quedar ahí para siempre; incluso para Satoru que le tenía cariño a Megumi desde que nació iba a ser todo un reto adaptarse a ese nuevo estilo de vida, pero estaba dispuesto a hacer todo lo que fuera necesario con tal de cumplir la promesa que había hecho.

—Satoru… —su pareja le sacó de sus pensamientos y Gojo volteó a verlo—, ¿estás completamente seguro de esto? Me refiero a…

—Sé a lo que te refieres —le interrumpió— y la respuesta es sí. No creas que no me asusta, claro que me aterra la idea de no poder ser algo parecido a un buen padre para él… a veces soy muy idiota, descuidado e infantil, pero haré mi mayor esfuerzo, lo prometí y lo voy a cumplir —dijo decidido y le sonrió a su novio.

Geto trató de devolverle la sonrisa, pero no le salió del todo.

—Haz pensado… —se puso serio de nuevo— ¿qué vas a hacer si su padre regresa por él? ¿No crees que deberías informarle de lo que pasó?

—No va a regresar por él —se volteó hacia enfrente y se puso serio también—, estoy seguro que no lo hará y es mejor así.

—Pero es su padre, él tiene la obligación de…

Encuentros y desencuentros || Jujutsu Kaisenजहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें