El demonio Seo (changin/jeonbin)

3-

‡en cuatro‡

Después de un día, Jeongin se encontraba haciendo el desayuno.

En eso baja Seo y lo abraza por detrás.

Jeongin pudo escuchar algo que le susurró el demonio.

-tú me debes algo...

Jeongin recordó.

Pero no lo quiso decir.

-Yo no te debo nada, Seo...

-claro que sí, mi bonito, yo bien se qué lo recuerdas.

-bueno, lo recuerdo pero... No sé ni tú nombre para estar follando.

-Oh... Pues entonces te lo digo y ya.

-pero...

-Es Seo changbin.

-¿Ese es tú nombre?

-Sí, ¿Ahora que esperas? Ya te dije lo que querías saber.

-esta bien, pero no lo hagas tan fuerte. Me partiste el culo esa noche...

El demonio rió.

-claro, tendremos sexo cómo tú quieras.

Sin más lo cargo y se lo llevo al baño.

Al llegar, recostó a Jeongin en la fría loza del lavamanos.

Jeongin trago duro y sintio cómo el demonio le bajaba su ropa interior y exterior.

Quedo con la camisa y el sostén puesto.

Seo, cómo un buen demonio se sacó su boxer y su pantalón.

Agarro al menor y lo puso en cuatro.

Con su entrada descubierta, alineó su pene en el agujero.

Entro y empezo a dar rápidas estocadas.

Yang por otro lado, no podía dejar de gemir.

-Ah~ huff! ¡Ngh~ A-Ah!~

Con la oportunidad de hacerlo, el demonio saco sus colmillos y se acercó al cuello del Omega.

Inesperadamente mordio.

El menor se iba a mover pero se quedo totalmente quieto cuando el mayor lo anudo.

-¡AH! ¡duele mucho!

Grito fuertemente.

Seo solo veía como el menor gemía de dolor.

Lágrimas de dolor se acumularon en los zorrudos ojos de Jeongin.

Esto quería decir que... Definitivamente Seo ya era su alfa y el su Omega.

El nudo se fue desinchando y cuando ya desapareció, el demonio tomó en sus brazos al cansado omeguita.

-ya soy tu alfa, así solo serás mío.

Lo acomodo entre sus caderas, y de un momento a otro el demonio estaba dentro de Jeongin.

-No te puedo montar, me duelen las piernas...

-tranquilo, yo te ayudo.

Tomó las caderas del menor y fue levantando y bajando su cuerpo.

Dado ahora que lo estaba montando, el pene iba más profundo en el agujero.

-¡Agh, Agh!~ ¡Mierda!~

-no te desesperes mi angel...

Jeongin esta vez empezo a hacer los movimientos.

Una, y otra, y otra vez saltaba sobre la larga y ancha polla.

Con los ojos en blanco, labios húmedos y cubiertos de una rojiza capa de tanto morderlos, gemía el nombre del demonio repetidas veces.

-vamos mi angel, ¿No te gustaría tener unos cachorros míos dentro tuyo?

Jeongin asintio y le saco una sonrisa a el demonio.

Para terminar de saltar fue saliendo gotas de semen y después chorros y después montones.

El interior de Yang ya no podía con más semen y fue dejando caer gotas de este líquido.

De sus suave y blanquiza piel se acomulaba sudor.

Saltaba cómo sí fuera un pony.

Después sus piernas se cansaron y empezo a dar movimientos en círculo sobre el pene del demonio.

Y después de horas terminaron de hacer su desastre en el baño.

Wow... Tres dias de "conocerse" y ya eran alfa y Omega.

...