love me back | papufresco

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miguel's pov;

—¿Ves? Te dije que no era tan grave, papu— Luis y yo caminábamos en el estacionamiento del hospital hacía mi auto. Le habían colocado una bendita en el labio inferior, pues tenía una fisura bastante notoria. Tomaba mi mano mientras que con la otra sostenía una compresa helada que le habían brindado para disminuir la hinchazón en su rostro.

—Mira como estás...— Formé una mueca adolorida mientras examinaba su rostro una vez más. La manera tan "despreocupada" en que tomaba las cosas me resultaba desesperante algunas veces, pero no tenía intenciones de obligarle a dejar de hacerlo.

Tenía su lado bueno, supongo.

—Ya pasó, papu— Se inclinó a mi dirección para besar mi frente; provocándome un notorio sonrojo ante lo drásticamente que el calor se expandía bajo la piel de mis mejillas.

—¿Piensas ir mañana así a la escuela?— Asintió mientras le abría la puerta del copiloto para indicarle que ingresara; acción que acató al instante. Rodeé el auto e imite esto mismo, acomodándome el cinturón una vez cerré la puerta a un lado de mí.

—Ya no te preocupes tanto, papu. Hablemos de algo más...— El tono en su voz fue disminuido por un bostezo saliendo de su boca; no pude evitar reírme por la ternura que esto me dió, aunque a los segundos consiguió contagiarme.

—Te llevaré a tu casa primero— Respondí sosteniendo una sonrisa en lo que ponía en marcha el auto y salíamos del estacionamiento.

—¿Y si te quedas a dormir conmigo?— Volteé inmediatamente a verle, alzando una ceja algo extrañado por su proposición. No era nada nuevo que durmiéramos juntos cada que podíamos, pero últimamente teníamos esa costumbre de dormir separados los domingos.

—Tendría que pasar por mi uniforme, y para eso mejor me quedo en mi casa, tonto— Su risa se hizo presente, a lo que puse los ojos en blanco antes de volver a sonreírle con amplitud.

—Ta' weno... Mh... Creo que quiero preguntarte algo— Le miré de reojo antes de asentir lentamente.

—Es personal— Agregó, a lo que me limité a encogerme de hombros; mostrándome accesible a esto. Se quedó en silencio un momento, intrigándome aún más.

—Dilo, me estresas— No lo decía enserio, claramente.

—¿Alguna vez has tenido relaciones?— ¿Eh?

Mis cejas se fruncieron y mi vista volvió a desviarse hacia él; pese de la poca iluminación que había y el hecho de que su tez fuese morena, podía notar que su rostro estaba completamente enrojecido.

—¿Enserio quieres hablar de eso?

—¡Ya somos novios, papu!— Exclamó.

Detuve el auto en seco, lo que lo asustó un poco, pero al caer en cuenta de que estaba respetando un semáforo se tranquilizó. Yo estaba que los nervios me carcomían.

Qué imprudente.

—¡Sí, pero-..! Okay, no tengo cómo contradecirte— Tomé algo de aire en un intento por tranquilizarme. —¿Por qué la pregunta?

—¿Es un sí?— Su expresión era una mezcla entre curiosa, tímida y... ¿molesta?

—No. No he tenido nada, ni siquiera novia— Si es que no cuento las del jardín de niños.