Capítulo 1: Sobrevivir

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Un niño corría por las calles mientras sostenía una pequeña bolsa en brazos, evadiendo a las personas — ¡Atrápenlo! — gritaba un señor mientras corría detrás del niño — ¡Ven aquí ratero! — grito el señor antes de caer sobre la acera, perdiendo de vista al niño — ¿Hielo? — se preguntó al señor al ver el motivo de su caía.

¡Genial! — grito el pequeño mientras corría con su bolsa en manos — ¡TENGO PAN! — grito eufórico el niño mientras entraba a un callejón hasta el final, se arrodillo a lado de un muro deslizándose debajo del contenedor de basura sacando unos ladrillos de la pared e ingresando al lugar —¡Hermano!

El niño vio su alrededor y no vio a nadie — Umm seguro aun no sale de la escuela, le esperare aquí — dejo el pan en el suelo mientras se iba a echarse en su cama, tirándose encima del colchón soltando una nube de polvo — Coff*coff* olvide que tenía que sacudir — se estiro tomando una radio vieja encendiéndola, buscando su frecuencia favorita, escuchándola con atención.

Al cabo de una hora mientras escuchaba un reportaje de héroes, unas latas sonaron haciendo que Izuku girara a ver sonriendo — ¡Hermano! — corrió a abrazar a su hermano — Hola... — sacudió su cabello, sacando polvo de el — ¡Ah espera! — se soltó del abrazo y corrió a una esquina — ¿Qué buscas? — el chico sonrió al encontrar lo que quería — ¡Ten hermano! ¡Ayer cumpliste 13 años! ¡Feliz cumpleaños Touya nii-san! — Touya veía una manzana verde, quien le ofrecía su hermano pequeño, una manzana en buen estado — Her-hermano... gracias... pero deberías comerlo tú, estas en crecimiento — ¡Tengo 5! ¡Ya estoy grande! — el otro rio — Ven, te traje algo

Juntos fueron a la cama y Touya saco cosas de su mochila — Mira lo que tengo — Touya le mostro una prenda — ¡Fabuloso, un polo! — lo tomo y comenzó a quitarse el polo que tenía puesto — ¿Qué opinas Izuku? — le pregunto una vez tenía el polo puesto parándose para poder verse — ¡Me encanta! — Touya sonreía mientras lo miraba — No tuve oportunidad de traerte esto antes, ten — le dio una barra de chocolate — ¿Qué es eso? — Chocolate — Izuku lo miro por un rato antes de tomarlo y darle un bocado — ¡SUGOI!

Inmediatamente Touya le tapó la boca mirando arriba — Shh recuerda que nadie sabe de este sótano, podría encontrarnos el recepcionista del edificio — el pequeño asintió mientras degustaba el chocolate como si fuera lo mejor de la vida, cuando llego a la mitad del chocolate le ofreció al mayor — No, es para ti — pero el pequeño insistió — Esta bien pero solo un poco

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Y así pasaron los meses Touya le visitaba los lunes y jueves sin falta alguna, siempre que podía le traía algo, mientras Izuku solo jugaba o recorría las calles robando comida — ¡Ahhh! Ayúdenos — movía sus trozos de madera — No se preocupen, ¡Ya estoy aquí! — mientras con una mano levantaba un ladrillo que descendía — Ante mí los villanos caerán, ríndete araña mutante — el niño se sumergió en su juego sin darse cuenta quien entraba a su guarida, como él le decía.

Izuku — el niño volteo a verlo, pero su sonrisa se desvaneció al verlo con heridas — ¿Hermano que te paso? — el no respondió — Traje unos libros para que estudies, cuídalos si, debo llevarlos para el otro jueves— Izuku solo lo veía con temor — Her... — Escucha Izuku, debes comenzar a practicar tu quirk, para que no te pase como a mi — el menor noto que en estos últimos meses su hermano había estado desanimado, pero siempre sonreía para el — ¿Harías eso por mí? — el menor sin titubear asintió, era jueves por lo que pasaron la tarde juntos, él se despidió contándole que él iba entrenar y mostrarle a su padre sus logros, se fue de su guarida — ¡Suerte hermanito! ¡Lo dejaras con la boca abierta! — Touya sonrió — Claro, así será

EL FLUIR DE LA VIDAWhere stories live. Discover now