Latidos que no dije /HYUNIN

capitulo 13

El lunes en la mañana, Hyunjin volvió a la escuela sintiendo su cuerpo antes entumecido y pesado, ahora ligero y con energía.

Pasó sus clases ya sabiendo que hacer, sus entrenamientos volvieron a ser rigurosos, pero no se quejó. Tendrían un partido pronto que sería transmitido por televisión.

Felix no había asistido aquel día a la escuela y Chan parecía abadito todo el tiempo.

Al final del día, se dejó caer con algo de cansancio fuera de la biblioteca, eligiendo sentarse en el pasto bajo la sombra de un árbol.

No esperó mucho hasta que vio a Jeongin salir del lugar, se levantó y se acercó al menor con una sonrisa.

—Hola—saludó. Se sentía tan bien volver a la rutina.

—Hola—saludó el menor con una enorme sonrisa y mejillas sonrojadas.

—¿Estás listo?—preguntó Hyunjin y Jeongin asintió.

—Si, vamos antes de que se termine la hora de visita.—el mayor asintió y ambos emprendieron camino a la parada de autobuses.

Mientras esperaban, Jeongin recargó su cabeza sobre el hombro del mayor.

Hyunjin sintió una sonrisa crecer en su rostro y se mantuvo quieto mientras el autobús llegaba, escuchando a Jeongin hablar sobre su clase de química.

El viaje hasta el hospital se sintió tranquilo. Han se sorprendió un poco al ver a Jeongin, pero de todos modos le sonrió y agradeció por las flores.

Los tres pasaron el rato juntos hasta que Minho llegó. Hyunjin lo observó acariciar la mano de Jisung y mirarlo con cariño. De alguna forma, sabía que pasara lo que pasara entre ellos, todo iba a estar bien.

Al terminar el horario de visita ambos se despidieron y emprendieron su camino hacia su siguiente destino.

Cuando llegaron al departamento ahora únicamente de Felix, Jeongin dejó que el pecoso se acurrucara contra él en el sofá mientras le acariciaba los cabellos.

Hyunjin le preparó un poco de sopa para comer y luego acomodó su habitación.

"—Dijo que dependiamos demasiado el uno del otro—murmuró el rubio con voz ronca, ojos rojizos y sorbiendose la nariz—nos conocemos desde los doce años, ¿cómo puede esperar a que simplemente aprenda a vivir sin él de un día para otro?"

Jeongin le aseguró que Chan probablemente no estaba haciendo aquello con malas intenciones. Al final Felix cayó dormido y ambos salieron de su departamento dejando una nota.

No todo estaba en su lugar, aún había piezas rotas, pero afortunadamente, pese a que no podían volver a juntarse en aquellos momentos, encajaban y tenían arreglo.

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El martes por la tarde, Hyunjin tenía una cosa importante por hacer antes de ir a casa de Jeongin.

Ddeum volvía a casa y lo había invitado a cenar, pero primero debía hacer una parada.

Observó la residencia frente a él, asombrandose de su tamaño y tocó el timbre. Pasaron varios segundos hasta que un castaño le abriera la puerta.

—¿Hyunjin?—Seungmin le miró confundido.

—Hola—saludó el azabache—lamento haber venido sin avisar.

—¿Cómo...?

—Ah, Jeongin me dijo donde vivías, espero no te moleste.—sonrió con vergüenza—¿estás ocupado? quisiera hablar un momento contigo.