𝗆𝗈𝗈𝗇𝗅𝗂𝗀𝗁𝗍. [Sirius Black]

I

[Isabella's pov]

La pequeña Isabella de tan solo 11 años, estaba acomodando su cuarto, hacía unos dias que se habían mudado y le faltaba desarmar algunas cajas, cuando de pronto su madre la llama:

–Isa, cariño, puedes bajar un momento?– Gritó su madre.

–Enseguida!– Dijo la niña saliendo de su habitación.

La madre de la pequeña estaba cocinando galletas, a Isa le pareció raro, ya que su madre no solía cocinar seguido, siempre que lo hacía era por alguna ocasión especial.

–Cariño, hoy por la mañana me crucé con la vecina, y adivina que? también son magos! me pareció muy simpática y nos invitó a que fuéramos a visitarla a su casa para tomar el té, me comentó que tiene 2 hijos, así que arréglate, que apenas se terminen de hornear éstas galletas nos vamos.–Dijo su madre, revisando las galletas.

Isabella asintió y subió a su habitación, decidió ponerse un vestido azul claro, ya que se encontraba solo con su pijama y afuera hacía calor, era verano.

[...]

–Isabella, recuerda que siempre hay que ser educadas, la vecina por lo que he notado es de esas personas a las que le importa mucho el estatus de sangre, así que por favor trata de amoldarte a eso–Mencionó su madre.

Seamos honestos, a Isabella no le importaba el estatus de sangre, le parecía una estupidez discriminar a las personas de esa forma, su madre era de las personas a la que le importaba mucho eso, pero comprendió a Isabella cuando le menciono que estaba en desacuerdo con este tema.

–Si madre, lo sé–Dijo Isabella mientras su madre tocaba la puerta de la casa.

En un par de minutos las recibió una señora joven, a la vista era muy elegante, y atrás de ella estaba un pequeño chico, este era lo opuesto a la señora, tenía el pelo alborotado y largo, y a su vestimenta no era tan elegante.

–Hola, Minette! pasen a mi casa, son más que bienvenidos–Dijo la señora, sonaba un poco arrogante pero amable.–Les presento a mi hijo, Sirius.

Sirius sonrió en forma de saludo, algo que a Isabella le pareció medio grosero pero decidió no darle atención, se lo notaba medio incómodo.

–Tu debes de ser Isabella, tu madre me contó muchas cosas de ti–Dijo la señora– mi nombre es Walburga, pero llámame tía, cariño.–

–Mucho gusto señora–Dijo Isabella con una sonrisa en la cara, aunque esa mujer fuera arrogante, a ella la trataba bien, le agradaba.

–Sirius, ¿Por que no le muestras tu habitación a Isabella? Si quieren pueden ir al jardín –Dijo Walburga.

–Claro–Dijo en un modo confundido– sígueme.

Cuando ya nos alejamos de los adultos, Isabella habló.

–Está bien, hagamos fáciles y rapido las cosas, ¿Te importa el estatus de sangre?.

Sirius quedo sorprendido, supongo que nunca se imaginó que Isabella preguntara eso.

–No, me parece absurdo.– Dijo Sirius con una cara de desagrado.– ¿A ti?

–Genial! a mi tampoco me importa ese tema, me agradas entonces. –Dijo Isabella con una sonrisa en la cara.

El resto del día se la pasaron hablando entre ellos, conociéndose. Isabella tuvo la oportunidad de conocer a Regulus, le pareció un chico agradable, aunque el era igual que sus padres, pero ella sabía que solamente era para poder agradarles y que no lo traten como trataban a Sirius.
En una de sus tantos temas de conversación, surgió el tema de hogwarts.

–Y tu, ¿En que casa quieres estar?–Preguntó Isabella.

–Obviamente Gryffindor– Dijo Sirius con aires de grandeza.– ¿Tú?

–Gryffindor también, pero me daría igual, mientras que no sea Slytherin estoy conforme.–Dijo Isabella con una sonrisa.

De pronto se escuchó la voz de la madre de la pequeña, llamándola para que ya se vayan a su casa.

–Supongo que es hora de que te vayas–Dijo Sirius–Si quieres nos podemos juntar otro día, antes de empezar hogwarts.

–Claro sirius, la pasé muy bien contigo hoy–Dijo Isabella dándole un abrazo de despedida a Sirius–Nos vemos luego!.

–Nos vemos luego Belly!– Mencionó sirius.

–¿Belly?–Preguntó Isabella, con una cara de confusión.

–Oh, tu nombre me parecía muy largo, y sonaba muy serio también, si te molesta, puedo llamarte Isabella–Dijo un Sirius medio nervioso.

–Claro que no Sirius, solamente que siempre me llaman Isa o Isabella.–Dijo la chica tranquilizandolo.

–Entonces, Belly será un apodo que solamente yo te diga ahora, me gusta.

Luego de despedirse de la familia, Isabella volvió a su casa feliz, ya tenía un nuevo amigo con el cual iría a hogwarts.
A pesar de que ellos dos eran físicamente muy diferentes, Isabella daba ese aspecto de amabilidad y se hacía ver educada y fina, sin embargo Sirius era todo lo opuesto, tenía el aspecto de chico rebelde. Pero lo que los hizo tan inseparables fue su opinión y su parecida forma de pensar.
Ese día se conocieron sin saber que serían los mejores amigos que tendrían, sin saber lo qué en un futuro pasaría.

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HOLAAA, volví a escribir por acá! espero que esta fic les guste, voy a tratar de actualizar lo más seguido que pueda, me ayudarían muchísimo si le dan a la ☆! sería una forma de apoyo e inspiración,  gracias <3

-bri.