YO SOY EL PADRE DEL VILLANO PARTE 2

Capítulo 295: Extra

La brisa del mar soplaba y le revolvía el pelo. Aportó un poco de claridad al cielo de mayo.

El fotógrafo tomó algunas fotografías. Luego eligió el lugar del rodaje y se preparó para tomar una foto familiar.

Esta vez, Lin Luoqing y Ji Yuxiao no querían tomar un retrato familiar formal. Querían que fuera animado y vívido. Por eso no se quedaron quietos. Llevaron a los dos niños a jugar a la playa.

Las olas les mojan los pies. Los dos adultos y los dos niños no paraban de reír. Incluso Lin Fei tenía una sonrisa en su rostro.

Una vez que se divirtieron lo suficiente, Lin Luoqing y Ji Yuxiao se agacharon y construyeron un pequeño castillo en la playa con Lin Fei y Ji Leyu.

Manos pequeñas sostenían manos grandes mientras lo apilaban capa por capa.

Esto fue así hasta que se terminó el castillo. Lin Luoqing se sentó en el suelo, sosteniendo a Lin Fei y dejando que el niño se sentara en susbrazos. Ji Yuxiao también sostuvo a Ji Leyu en sus brazos y pidió a los fotógrafos que tomaran fotografías de la familia de cuatro.

El cielo azul estaba claro como si lo hubieran lavado y las gaviotas pasaban volando. Lin Fei se sentó en los brazos de Lin Luoqing, su rostro lleno de una felicidad que no podía ocultarse. Junto a él, Ji Leyu sonreía y sus ojos eran brillantes, vívidos e inocentes.

No habían crecido pero sus vidas habían sido reescritas.

Tomaron los retratos familiares. Luego Lin Luoqing y Ji Yuxiao se concentraron en tomar fotografías de la boda.

Lin Luoqing entregó a los dos niños a Ning Yu y Yu Jiayou, pidiéndoles que ayudaran a cuidarlos.

Ning Yu los abrazó con cada brazo. —No te preocupes, prometo vigilarlos.

Lin Luoqing le agradeció. Miró a Lin Fei y Ji Leyu nuevamente antes de decirles: —Recuerda que no puedes adentrarte en el mar. Sólo puedes jugar en la playa, ¿sabes?

Lin Fei asintió.

Ji Leyu también dijo obedientemente:—Lo sé.

—Eso es bueno. Primero iremos a tomar fotos y es posible que no nos demos cuenta. Tienes que escuchar al hermano Ning. Si hay algo, habla con él primero, ¿entiendes?

—Entiendo.— Ji Leyu lo instó con una sonrisa: —Papá, ve a cambiarte de ropa rápidamente. Toma fotos hermosas~

Lin Luoqing se rascó la nariz. —Sabes mucho.

Luego volteó a frotar la cabeza de Lin Fei. Luego fue al auto a cambiarse de ropa.

Se puso una camisa blanca nueva. La camiseta anterior ya estaba sucia después de mancharse con arena durante la pelea con Lin Fei.

Ji Yuxiao se había puesto una camisa blanca que hacía juego con él. Los dos se tomaron de la mano y caminaron juntos descalzos por la playa. La brisa del mar era fresca, las olas se agitaban en el mar, la delicada arena blanca envolvía conchas y se escuchaban los susurros del mar.

Ji Yuxiao levantó a Lin Luoqing y lo hizo girar en la playa. Lin Luoqing no pudo evitar reír antes de abrazar su cuello y besarlo.

Tomaron fotografías una tras otra. Algunos estaban en la playa, otros en aguas poco profundas, algunos en un yate y otros mientras navegaban en el mar.

Cuando cayó el crepúsculo, una ardiente puesta de sol se extendió sobre el mar, quemando todo el mar como si estuviera cubierto con un vestido de novia rojo. Lin Luoqing se apoyó en el hombro de Ji Yuxiao y observó cómo el sol se hundía lentamente en el fondo del mar.