Solo somos nosotros

12. El pacto

Eran las nueve de la mañana. Aunque eso será relevante después de que os haga un resumen de mi última semana.

Marco y yo nos habíamos estado viendo. Hablábamos por videollamadas todos los días sobre nosotros, pero en persona... hacíamos de todo menos hablar. Era como si ambos actuáramos como amigos y luego se nos olvidara por completo cuando estábamos juntos. Al principio pensé que sería una buena idea pero luego me di cuenta de que no sabía en que lio me estaba metiendo. Y mucho menos sabía como salir.

Ahora si. Eran las nueve de la mañana. Había quedado con Marco para ir a la playa, la verdad, siempre había pensado que acostarte en la playa con alguien sería maravilloso. -spoiler, no lo fue-.

Me preparé y me puse una falda corta y un top que me había comprado con Claire cuando salimos de shopping.

Salí de mi casa y me dirigí a la playa. Marco no había venido a recogerme como de costumbre porque primero iba a ir a comprar una cosa que le había pedido su madre y le pillaba de camino.

Al llegar no le vi, pero en su lugar me envió un mensaje.

Marco: ¿Quién está detrás de ti?

Y si. Estaba él. Quien no se cortó ni un pelo en estampar sus labios contra los míos. Me encantaba cuando me pillaba desprevenida, y en el fondo, sabía que a él también.

Dimos un paseo por la playa hasta llegar a unas rocas, un tanto alejadas de las personas que podrían pasar por ahí. Primero colocamos unas toallas que él había traído y después... fuimos al grano. Yo me apoye en una roca mientras él estaba sobre mi con esa carita que tanto me gustaba. Y, he de decir, que fue lo más incómodo que he probado en mi vida.

Al terminar se formó un silencio entre nosotros dos, nos tumbamos uno al lado del otro y escuchamos las olas del mar. Constantemente pensaba en lo que estábamos haciendo, ¿era sano? además estaba asustada ya que Claire afirmaba que yo le gustaba a Marco, y si quería algo más tenía que empezar a poner límites.

-Tenemos que hablar. -Dije seriamente rompiendo el silencio.

-¿De que?

-De esto- le señalé a el y a continuación a mi misma.

-¿Quieres que seamos pareja o algo?

-No.- fue rotundo, y aunque no fuera mi intención sobre bastante borde.

-¿No?

-mira, me lo estoy pasando muy bien contigo y creo que no hay ningún problema en que sigamos divirtiéndonos.- hice una pequeña pausa.- Pero... Con la condición de que sea solo eso.

-¿Solo eso?

-Diversión. Únicamente eso.- Marco hizo una mueca pensativo.

-Está bien.- Me sorprendió lo bien que le pareció aunque sabía que no sería tan fácil.

-¿Pero...?

-Pero... yo también tengo mis condiciones.- Esto se ponía interesante.

-A ver...¿Cuáles?

-Si es solo diversión, no querremos confundir a nadie y hacerle pensar que somos algo más, ¿no?

-Pues...-No lo había pensado- Supongo que no.

-Entonces, no se lo podemos decir a nadie.

-¿Ni a Claire, Sammy, Eli...?

-¿A quién más conoces como para decirselo?

-Bien visto...

-Bueno, ¿Entonces trato hecho?- Dudé pero al fin me decidí por estrechar su mano, la cual me había extendido.

-Trato hecho.

*****

Era domingo y si. Tenía planes con todo el grupo. Habíamos quedado todos en ir a una feria con comida y atracciones que hacían en Baldwin ese fin de semana. Todos estaban emocionados y yo a pesar de gustarme las atracciones le tenía bastante miedo a las montañas rusas, pero...¿No tenía que montarme si no quería, no? La verdad no quería quedar como la cobarde, aunque mejor eso a que me de un ataque de ansiedad.

-Ari.- Tocaron a la puerta de mi cuarto.- ¿Estas lista?- Era mi hermana.

-Si, solo me quedan las zapatillas.- Eli abrió la puerta y se sentó junto a mi en la cama.

-¿Asique las zapatillas? Estás con el movil todavía.

-Estoy leyendo.

-¿En el móvil?

-Es gratis, además aqui no hay librerías.

-¿Quien te ha dicho que no hay librerías? Hay una cruzando la esquina.

-Pero lo que me estoy leyendo solo está aqui. No está en ninguna librería.

-Bueno, me da un poco igual. Solo termina de arreglarte, tenemos que bajar en dos minutos. Aaron está casi aquí.

-Oye... ¿puedo preguntarte una cosa?

-Dime.

-¿Tu y...Aaron?

-¿Que si me gusta?

-Pues... Si.

-No lo se. Quizás.- Me lo dijo con naturalidad. Mi hermana nunca me contaba nada y estaba empezando a confiar en mi.

-Me alegro. En serio.

-Ahora me toca a mi. Y no te enfades.

-Entre Marco y yo no hay nada más que una amistad.- Mentira.- Es muy majo y eso... pero no es mi tipo.

-Bueno, está bien...

-Eli... Te lo digo en serio.-Mentira.- Si pasara algo te lo diría.-Mentira.

-Vale, no te presiono.- Se levantó y salió de la habitación. Yo estaba terminando un capítulo del libro, me había enganchado demasiado, pero debía de esperar porque tenía que irme.

Bajé las escaleras cuando terminé de ponerme los tacones y salí de casa.

-Eli, te espero fuera.

-Está bien. Tardo poco.- Cerré la puerta y cuando pensé que encontraría a Aaron como dijo Eli, estaba Marco.

-¿No venía Aaron?

-Me ha dicho que si podía ir yo, a él no le daba tiempo. ¿No piensas darme un beso?

-Oh, pensé que querías mantenerlo en secreto.- Dije provocándolo.

-Yo no veo a nadie.

-Mi hermana está apunto de bajar.

-Da tiempo a un besito.- Se acercó a mi. senti su respiración y sus ojos que buscaban saciar sus ganas me inundaron del mismo deseo pero me controlé y cuando estaba apunto de besarme me aparté, dejarlo con las ganas me encantaba. No es por ser mala, pero de verdad no había desperdicio en la cara que se le quedaba.

-Ya estoy. ¿Marco?- Mi hermana apareció por sorpresa.

-Aaron me ha dicho que no le daba tiempo a venir. Asique os llevo yo.

-Ah, pues bien.

-Subid al coche. No tardaremos mucho.

Obedecimos y como dijo Marco llegamos después de unos minutos. Claire y Sammy estaban increibles con unos vestidos a juego, y Aaron iba parecido a Marco. Con unos vaqueroa y una camiseta de manga corta.

-¿Lista para la noche mas divertida de tu vida?- Me dijo Claire.

-Eso creo.

*****

Y hasta aquí este capítulo.

Espero que os haya encantado.

Muy pronto más y mejor.

Un besito. Daniela. :)