3. ¿Me has llamado?

29 7 6
                                    

—Nadeem.

Después de un mes, todavía no he desarrollado mi poder, pero mi tía dice que lo haré pronto.

Me estoy llevando mejor con Brian y Mindy; ahora comemos juntos y nos hemos hecho buenos amigos. Le conté a Mindy sobre mis pesadillas, y en lugar de reírse, me dio un abrazo y me dijo que ella también las tenía cuando era pequeña.

—Neró me dijo hace tres horas en clase que mi tía quería hablar conmigo, así que allí voy.

Mindy me acompaña sin decir una palabra, pero con esa sonrisa que me hace pensar que está pensando en algo.

Me paro frente al despacho de mi tía, y Mindy se queda inmóvil cuando la miro seriamente.

—¿Qué? —pregunta con una sonrisa en los labios.

—No sé, tú me dirás. Hace tres días que no viniste a los entrenamientos físicos, y desde ese día, siempre andas con esa sonrisa —bramo un poco molesta, algo que es evidente en mis ojos.

—¿Hay algo que quieras contarme, Mindy? —digo, cruzándome de brazos y apoyándome en la escalera de caracol que lleva al despacho de mi tía.

—Bueno, ehm, pues...

—Mindy, ¿me lo vas a contar o vas a esperar a que mi tía venga por mí? —le pregunto haciendo un ademán de poner mi mano en su hombro—. ¿Sabes que puedes confiar en mí?

—Estoy saliendo con alguien —me dice con la cabeza baja.

—En serio, Mindy, me alegro por ti —le digo con voz reconfortante y una sonrisa—. ¿Y quién es el afortunado? —le pregunto mientras levanta la mirada hacia mí.

—Bueno, en realidad, no es un chico, es una chica —me dice mientras sus mejillas se vuelven rojas.

—Mindy, no me digas que te da vergüenza contármelo —le pregunto mientras me apoyo en la barandilla.

Ella guarda silencio y vuelve a bajar la cabeza, como si tuviera que avergonzarse, como si hubiera hecho algo malo.

—Mindy, a mí no me importa que te gusten las chicas, y además, me pone muy feliz que hayas encontrado a alguien que te quiera. No por ello vamos a dejar de ser amigas —le digo mientras le doy un fuerte abrazo—. ¿Vale?

Ella asiente con la cabeza.

—Te espero aquí fuera, ve dentro —dice mientras me da un apretón en la mano y me suelta.

Llamo a la puerta, y mi tía me dice que pase. Cierro la puerta detrás de mí y hago un ademán de sentarme.

—Me has llamado, tía —le pregunto mientras se da la vuelta en su silla negra y me mira a los ojos.

—Exacto —dice apuntando algo en una hoja.

—¿Puedo hacerte una pregunta? —le digo antes de que me diga lo que me tenga que decir.

—Dispara —suelta ella poniendo su atención en mí.

—¿Por qué no podemos salir de esta escuela sin mayores? —ya está, ya se lo he dicho.

El Bosque De Los Recuerdos [Terminada ✔️]Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu